Nombre: Erick Amador Sada Esqueda. Colegio: Educación. Materia: Cultura de la calidad.
Enviado por Erick Sada • 29 de Agosto de 2017 • Ensayo • 1.614 Palabras (7 Páginas) • 234 Visitas
Nombre: Erick Amador Sada Esqueda. Colegio: Educación. Materia: Cultura de la calidad.
En las siguientes líneas se hablara sobre “La cartilla moral” escrita por Alfonso Reyes. En este texto nos habla no solo de la moral, sino del respeto mutuo y a la sociedad, pasando por la patria y la naturaleza entre otros. Se tratara de desmenuzar la cartilla moral de la mejor y respetuosa manera.
En primer apartado del texto el texto Alfonso Reyes comienza describiendo lo que la moral es en sí, la define como una serie de reglas o una “constitución” no escrita que rige a todos los pueblos y todos los hombres cuya finalidad es el cumplimiento del bien. Pero aclara que el bien no es un sentimiento individual o propio del hombre quien lo busca pues el camino al bien puede conllevar a sacrificios de anhelos personales incluso de nuestra felicidad. Pero la búsqueda del bien nos hace sentir una felicidad más amplia que cubre cualquier felicidad individual. (Reyes, 2010, p. 16)
En este mismo apartado Reyes realiza un análisis sobre la procedencia del bien, si es por la razón o por el sentimiento. Llega a la conclusión de que el bien es encaminado por ambas cuestiones pues una complementa a la otra. (Ídem)
El autor continúa en la segunda lección de este texto parte de la distinción del hombre como naturaleza, en el cuerpo, y en alma cunado el hombre es espíritu Dice que aunque en ocasiones se habla de ambas partes como un mismo ser, para su visión, son dos cosas distintas. (Ibídem, p. 17)
Reyes indica que en el proceso de la moral se pada de una de estas partes a la otra, es decir pasamos de lo animal (cuerpo) a lo humano (espíritu). Pero que esto no significa dejar de lado nuestra parte “animal” para ser solo “espíritu” sino encontrar un armonía entre ambas martes para nuestro bien, en que nuestra parte natural se desenvuelva pero sin excesos sin alejarnos de el camino guiado por a conciencia. . (Ídem)
Así también se menciona que si el hombre no vive su necesidad material en plenitud no lograra realizar los “mandamientos del bien” pues como el antes lo menciono son aspectos que van uno de la mano del otro. (Ídem)
Pasando ahora al tercer apartado de la cartilla moral Alfonso Reyes aborda la voluntad, y de cómo no todos los hombres la tienen en su búsqueda de corregirse y buscar progreso en su existencia, aunque, según él, es lo más deseable. Pues si esto se presentara en todos los casos la humanidad no tuviera tantos retrocesos o estancamientos a lo largo de su historia. (Ibídem, p. 19)
Reyes remarca que si bien el progreso humano no es logrado, en cierta medida se aspira a una aproximación del mismo y es a ese progreso aproximado al que todo individuo debería aspirar. (Ídem)
Luego en este mismo apartado el autor describe “cultura” y “civilización” hablando de la relación inherente de la una con la otra que podrían ser creaciones de la ciencia pero son movidas a través de la voluntad mora “del perfeccionismo humano” y citando esta parte del texto: (Ídem)
“Cuando pierden de vista la moral, civilización y cultura degeneran y se destruyen a sí mismas” (ibídem, p. 20)
Continuando con su la cartilla moral en el apartado cuarto, Alfonso Reyes retoma al “bien” y su apreciación que es el acatamiento de una serie de respetos o mandamientos como el los llama que están siempre junto al individuo y son imposibles de ignorar pues nuestra conciencia nos los repite. Indica que la verdadera satisfacción solo se obtiene si se es bueno moralmente, el simple hecho de obrar bien nos permite ser felices dentro de nuestra sociedad. Entra entonces una relación recíproca entre individuos pues como ya antes se mencionó el acto del bien moral no siempre es propiamente benéfico para quien lo practica sino para otros en su sociedad, si todos los individuos predicaran con el bien la, desde un punto de vita así, seria colectiva. (Ibídem, p. 22)
Continuando por el viaje al texto de Alfonso Reyes en su quinto apartado comienza a desmenuzar al respeto desde diferentes vertientes iniciando por el espeto de cada ser humano por sí mismo en cuerpo y alma se refieren, es decir al sentimiento de dignidad propia. Partiendo de esta el hombre luego se desenvuelve con los demás seres humanos, convive y se desarrolla, crea vínculos, familias, ciudades, etnias y Estados. (Ibídem, 25)
En las anteriores instancias el ser humano es civilizado con el tiempo y representa roles o papeles definidos, unos con otros los seres civilizados tienen relaciones reciprocas, hacen asociaciones y se desarrollan mutuamente. Para lograr lo anterior el hogar es la primera escuela y es de ahí que nuestros actos, según Reyes, serán definidos o tomaran un rumbo específico. (Ídem)
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