Nuestro Entorno Y La Lectura

Nuestro entorno y la lectura

Para comprender un texto en su totalidad, es necesario tener en cuenta varios aspectos con distintos factores; mas, ahora nos centraremos sólo en uno, que nos interesó plantearlo y analizarlo.

Dentro de los factores psicológicos que dependen de nuestro estado anímico, existe una causa que puede influenciar en nuestra disposición para comenzar una lectura.

Cuando nos disponemos a leer un texto, todo nuestro alrededor puede resultar tanto perjudicial, como favorable, los comentarios que nos llegan, nuestras creencias, las opiniones de otros; pueden mediar en nuestra actitud para disponernos a leer un texto cualquiera.

Pero… ¿Cómo podemos afirmar que mi entorno social influye en la recepción que tendré de un texto?

Para empezar, nos referiremos a entorno social a todo aquello que nos rodea y con lo que entablamos relaciones; estando sujeto a nuestras condiciones de vida, trabajo, estudios, comunidad, etc., influyendo así en este caso, en cómo será mi recepción de un texto.

Una buena comprensión de lectura, consta básicamente en captar las ideas principales, cuestionamientos, para luego entender el verdadero significado del texto. Lo cual es influenciado y/o perjudicado por nuestras actitudes o disposiciones frente al texto, ya que nuestro entorno, sea familia, amigos u otros, diariamente están emitiendo ideas u opiniones frente a distintos temas; los cuales son recibidos por nosotros y en algunos casos aplicados o utilizados para reemplazar nuestros propios puntos de vista.

Debido a lo anterior, al momento de la lectura ocurrirán muchos cuestionamientos y prejuicios en base al texto, ya sea por un mal comentario, una opinión subjetiva, u otros.

Ejemplo:

Millaray está cursando 3° año medio. En la asignatura de lenguaje debe leer “El Quijote de la Mancha” para el próximo mes, el cual piensa que podría ser bastante interesante.

Los comentarios que ha recibido en su casa sobre el libro tampoco han sido favorables o alentadores para su lectura.

Aun no habiéndolo leído, sus compañeras le dijeron que el libro es “muy aburrido”, “latero”, “largo e inentendible”.

Debido a esto su disposición frente a la lectura del libro no será la misma de antes.

Al pasar días leyéndolo, no logro comprender ni terminarlo, provocando un mal desempeño en la evaluación del libro.

Logramos comprobar que si uno lee un texto por obligación o sin buena disposición (por cansancio, distracción, aburrimiento, etc.), no lo comprenderá mayormente y no tendrá la conexión necesaria con el narrador. Demostrando que los factores psicológicos que dependen de nuestros estados anímicos, influirán generando actitudes acordes con la lectura.

...