Opinión De Filósos

René Descartes: Descartes cuestiona todo lo que pasa en el mundo, busca un hecho empírico y cree fervientemente que el pensamiento el alma. Es decir la esencia del hombre, nos hace seres existentes, que somos una especie de sustancia pensante. Descartes creía que el cuestionarte un hecho te conducía a una verdad, pienso que él creía que lo que llama el pensamiento, eran las emociones que fluían al descubrir, experimentar, tocar, que cada sentimiento provocado por esas reacciones lo inspiraba a ver otro mundo, veía mil perspectivas y luego se cuestionaba el porqué de las cosas hasta llegar a comprender que todo en lo que creía, que todo lo que lo llenaba no era materia, no era carne o hueso era simplemente una vasija de emociones.

Siempre se buscará certeza, poniendo en duda y cuestionándote cada hecho que pase, para primero pensar y luego existir.

Pico Della Mirandola: Buscaba la transformación de la vida personal para sacar el potencial humano, y hacer un cambio en la sociedad. Creía en la humanidad, en lo divino lo trascendente y vital. El no se conforma con la mediocridad su éxtasis es alcanzar la cúspide y llegar a una especie de iluminación, cree en el esfuerzo en la lucha constante del ser humano para perfeccionar su vida como tal. Cree con todas sus fuerzas que Dios es amor y totalidad y es la máxima recompensa del hombre y que para alcanzarlo tenemos que transitar por una escalera empezando desde el amor. Busca el juzgar y amar a lo desconocido a aventurarse a tierras vírgenes y pisar una isla desierta que lleva a algo totalmente nuevo a algo totalmente divino.

Pascal: filósofo cristiano y un filósofo escéptico-místico o sentimentalista. Pascal enseña repetidas veces, y de una manera terminante, que la Filosofía no debe marchar con independencia y separación de la revelación divina y de la teología, sino que necesita de éstas, y es completada y perfeccionada por la fe. La razón humana sería mucho más débil e impotente para alcanzar la verdad, si no recibiera auxilio, vigor y fuerza de la fe o del orden sobrenatural. El mayor engaño o error de la razón del hombre y la señal más patente de su debilidad, es negar y desconocer que hay una infinidad de cosas que sobrepujan su capacidad y sus fuerzas propias. La religión cristiana es eminentemente racional, y se apodera de nuestro espíritu por medio de razones, así como se apodera de nuestro corazón por medio de la gracia la cual es en el orden práctico, lo que la fe y el dogma son en el orden intelectual. La gracia eleva y perfecciona la voluntad y el orden moral

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