Orfismo

Índice

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Introducción…………………………………………………………………………………4

El Orfismo……………………………………………………………………………….….5

Bibliografía…………………………………………………………………………….......13

Introducción

El presente texto se desarrolla basado en el Orfismo y la historia narrada desde el punto de vista de diferentes autores, para mostrar cómo la creencia de un alma pura e inmortal fue de gran importancia para grandes pensadores de la época enmarcada entre el siglo VI a.C. hasta los principios de la época cristiana, quienes empleaban éstas místicas creencias para dar una explicación a sus ideologías y pensamientos.

Esto lo desarrollaremos desde la narrativa de los mitos órficos e intentaremos concadenar la historia desde los diferentes autores y su influencia en el pensamiento de la época, limitándonos a la Grecia antigua y algunas aproximaciones a lo que conocemos como el mundo occidental de la época.

El Orfismo

En el presente texto, el orfismo según Graves (1985) comienza con Orfeo, el cual su nombre significa “en la orilla del río”, era el cantante y poeta más famoso de su época. Siendo hijo de Eagro, tuvo la fortuna o desdicha, según el observador, de conocer los misterios de los dioses y así mismo, difundir estos conocimientos en distintos lugares de la región. Esto dio inicio a lo que eventualmente se convertiría en las creencias órficas, de las cuales se basarían importantes filósofos como Pitágoras, Heráclito, Sócrates y Platón para explicar conceptos como el dualismo cuerpo-alma.

Por los planteamientos anteriores se tomará lo expuesto por Jaeger (1952), el siglo VI a.C. tuvo un significado importante para la Grecia antigua en cuanto a religión se trataba. A pesar de la amenaza del naturalismo filosófico, movimiento donde los pensadores de la época se preguntaban por el principio fundamental de las cosas, atribuyendo al origen del cosmos cualidades explicativas basadas en los elementos de la naturaleza, fue insuficiente para derribar las creencias y conceptos religiosos establecidos de manera popular, apoyados en el uso de imágenes y simbolismos de donde deriva nuestro documento el cual hace referencia a uno de estos o quizás el más influyente. Lo que nos da pie para adentrarnos en uno de los cultos en el cual hoy encontramos características y rasgos símiles hallados en algunas de las creencias de la cultura occidental.

Por otro lado, el  culto a Dioniso del cual hablaremos, fue recibido con tal acogimiento que logró salir de los campos hasta llegar a las ciudades, formando parte de fiestas públicas y religiosas. Gracias a dicho culto volvieron los misterios locales; se practicaban orgías, se  abstenían del consumo de carne; ocurrían sacrificios y también se realizaban exorcismos. Esto nos permite adentrarnos en los relatos de diferentes autores donde se describe el Orfismo, llamado así en alusión a su fundador; un cantor y músico bajo el nombre de Orfeo, quien lleva consigo una larga historia cargada de misticismo y de simbolismo basado en deidades como Dioniso, a éste lo encontramos en los mitos griegos como un Dios despedazado cuando era un niño por sus tíos (los Titanes), quienes después de haberlo asesinado se alimentaron con su carne.

Zeus (el dios del trueno en la mitología griega) se presenta como su salvador e impide que estos Titanes terminen de alimentarse lanzando un rayo que los convierte en cenizas. De estas cenizas nace la raza humana, quienes poseen un elemento bueno (dionisiaco) y un elemento malo (titánico). Gracias a Atenea, (diosa de la sabiduría, de las artes y las artesanías) quien había salvado el corazón de Dioniso, logra traerlo de vuelta a la vida.

En el diccionario de filosofía de Mora, podemos encontrar parte de la continuación de este relato donde Dioniso nace de nuevo del corazón tragado por Zeus. Esto es clave para comprender la doctrina de la transmigración de las almas.

La historia de Orfeo nos abre un camino que nos transporta a la incertidumbre de su realidad o posible creación a partir de los mitos y leyendas de la época, en los que podemos encontrar relatos que nos remontan en el tiempo a las diferentes explicaciones míticas, entre estas, a las de los dioses Deméter y Perséfone, los cuales después de nueve años regresaban a la vida a las almas que debían ser purificadas y se encargaban, en diferentes estados según su acercamiento, a la purificación. Este proceso también se podía evitar haciéndolo tres veces en el Hades.

Esto lo encontramos reflejado tal como lo plantea Restrepo (1996, p. 22) “Pitágoras buscaba la purificación y la salvación del alma por medio de la filosofía. Era, además, un creyente de la transmigración o “metempsicosis”. Debido a esta ideología no consumía carne y consideraba que el alma humana era un fragmento del alma “cósmica” y formaría parte de esta al terminar de purificarse”.

La cita anterior nos permite realizar una conexión entre los mitos órficos y el pensamiento de Pitágoras, que coincide con los mitos de Deméter y Perséfone, como es el hecho del no consumo de carne a raíz de la idea de que hacemos parte de un alma cósmica que debe purificarse. Así mismo, en Casadesús señala que;

En el aula se menciona una frase de Heráclito (pensador griego perteneciente a los presocráticos) muy conocida en El devenir, que nos dice que “todo fluye, y la naturaleza del alma no hay quien la pueda hallar”.  

Heráclito de Éfeso... han existido fuertes debates respecto a la veracidad y la conexión de este pensador con el Orfismo, sin embargo, inscripciones de las laminillas de Olbia durante el siglo VI a.C. donde se unen los conceptos de “vida-muerte-vida” o “paz-guerra” sugieren el estilo de Heráclito. Además de ello, algunas laminillas encontradas en Pelina, Tesalia, coinciden con sus ideas al anunciar recompensas en un mundo de donde existe la vida después de la muerte. (Garcia-Baró, 2004, p. 49)

En la cita anterior observamos la influencia del orfismo en el concepto de vida-muerte-vida enseñada por Heráclito, descubierta en las laminillas de Pelina y Tesalia (ciudades ubicadas a la izquierda del río Peneo mencionado como el lugar donde murió Orfeo) el fundador del culto  dionísiaco y los ritos órficos. Esto nos lleva a cuestionarnos y dar paso a otros filósofos de la época como el que abordamos a continuación.

    Sócrates es posiblemente el más influyente de los pensadores griegos cuando hace referencia a la ética, al método mayéutico que trae al presente el conocimiento que se encuentra en el alma por medio de cuestionamientos, y nos habla acerca de la constitución cuerpo-alma; presentándonos al cuerpo como la cárcel del alma, donde el cuerpo se corrompe por medio de las pasiones (elemento titánico) y el alma es de naturaleza divina y eterna (elemento dionísiaco) los cuales fueron mencionados anteriormente. Sócrates es influyente especialmente para su discípulo Platón, en quien encontramos elementos del orfismo en algunos de sus escritos. Podemos decir que Platón toma una actitud pasiva frente a la idea del Hades, donde los principales personajes en aparecer en el mito de Er (dibujo realizado por Platón donde identificamos los elementos del Hades) son las almas, las cuales deben esperar el destino que les será revelado por los jueces. Una contradicción que se presenta en las laminillas, donde se plantea que el alma tiene oportunidad de elegir su propio destino. Con base en esto podemos concluir que el alma del orfismo y el alma platónica tienen el mismo principio pero un fin diferente.

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