PENSAMIENTO DE PROTÁGORAS

¿Quién era?

Protágoras de Abdera ​ fue un sofista griego. Admirado experto en retórica que recorría el mundo griego cobrando elevadas tarifas por sus conocimientos acerca del correcto uso de las palabras u ortoepía. Platón le acredita como el inventor del papel del sofista profesional o profesor de "virtud".

PENSAMIENTO DE PROTÁGORAS:

La ética de Protágoras se basa en el sentimiento de convivencia de los ciudadanos tal y como se manifiesta y funciona en la vida social.

Protágoras defendía el relativismo y el convencionalismo de las normas, costumbres y creencias del hombre y dice que el hombre es la medida de todas las cosas. Respecto a su relativismo podemos interpretar que:

Protagoras se refiere al hombre como particular y concreto, el individuo y que cada hombre tendría su “verdad”. Yo así lo interpreto: lo que a mi me parece frío es frío aunque no le parezca así a otro.

Pero tambien podemos interpretar que entiende hombre como ser humano y tendríamos que hbalar entonces de un relativismo social en sentido a que aceptamos como verdadero lo que nuesra sociedad dice que es verdadero.

Protágoras afirma que el hombre es la medida de todas las cosas, lo que también implicaría que la verdad es relativa a cada quien.

Es como esa frase que dice “nadie tiene la verdad absoluta” ya que le llamamos real y verdadero solo a lo que nosotros conocemos en base a experiencias.

Escepticismo y agnosticismo

También hizo una proposición de agnostismo : respecto a los dioses, no tengo medios de saber si existen o no, ni cuál es su forma. Me lo impiden muchas cosas: la oscuridad de la cuestión y la brevedad de la vida humana.

La teoría de los juicios contrarios

El dominio de esta técnica ofrecería al poseedor la disposición, por medio de su arte, de convertir en más fuerte el argumento más débil. Sin embargo, es importante señalar que Protágoras no contemplaba el uso de esta técnica de forma meramente instrumental, por mero afán oportunista, sino que la apoyaba en un complejo discurso en el que se debatía la virtud.

Yo interpreto su pensamiento como simple relativismo de la verdad de las cosas, como que cada hombre es la norma de lo que es verdad para sí mismo, y que toda verdad es relativa para el individuo que la sostiene y que no podría tener validez más allá de él. Él, con su frase célebre, se refería al ser humano y no a cada sujeto, por eso tenía fama de moderado, no era radical.

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