PENSAMIENTO HUMANISTA
Enviado por • 21 de Febrero de 2015 • Tesis • 16.682 Palabras (67 Páginas) • 1.852 Visitas
Introducción
El humanismo y el renacimiento son movimientos culturales, que dan inicio a una época de florecimiento cultural, también habla del conocimiento del hombre, cultivó la inteligencia, el espíritu crítico y la investigación.
El renacimiento es un movimiento de renovación cultural. En esta época se manifiesta el amor a la naturaleza a las ciencias y a la vida en la tierra.
Estos dos movimientos dieron libertad de pensamiento y exaltación de la personalidad humana. Todo esto fue inspirado en la cultura clásica (Greco Romana).
Su máxima expresión se manifestó en las artes plásticas así como en las letras. Predominó el espíritu creador
UNIDAD I.PENSAMIENTO HUMANISTA.
1.- PENSAMIENTO HUMANISTA
Es un concepto definido desde la filosofía y se trata de una actitud que intenta poner especial atención en la dignidad y el valor de la persona humana; tomando en cuenta como un ser racional capaz de practicar el bien y encontrar la verdad.
Se trata también de un concepto utilizado para definir los movimientos culturales y literarios en Europa del siglo xiv y xv, resaltando el valor de lo clásico por sobre su importancia en el contexto cristiano.
El humanismo se origina en Italia a fines de la edad media, con personajes como: Dante y Francesco de tetrarca, realizando grandes aportaciones al descubrimiento, otro que atribuyo a la información de este movimiento fue Giovanni pico della mirándola, qui en logro plasmar los ideales humanistas centrados en la dignidad humana y el cual querían imitar su estilo y lengua delos escritores clásicos, por ello se desarrollaron lo gramático, retorico, la literatura, la filosofía moral y la historia, ciencias logadas al espíritu humano en el marco general de la filosofía.
Leonardo da vince, el hombre de Vitrubio en un sentido amplio, llámese humanismo al sentimiento individual y colectivo de una civilización en la que destaca de manera prominente la admiración, exaltación y elogio de la figura humana y el hombre, entendido éste no como figura masculina, sino como género humano, en que florecen la cultura, el deporte, el arte y todo el quehacer humano se vuelve trascendente. Su objetivo es enaltecer la dignidad humana. En la historia ha tenido lugar en muy pocas ocasiones: durante el siglo de oro en Grecia, retomado éste en el renacimiento europeo, el idealismo alemán y posteriormente en un sinnúmero de puntos aislados de la historia. Hoy atraviesa una profunda crisis.
En su sentido específico, el humanismo es un movimiento intelectual, filológico, filosófico y artístico europeo estrechamente ligado al renacimiento cuyo origen se sitúa en el siglo xiv en la península itálica (especialmente en roma, Venecia y Florencia). Retoma el antiguo humanismo griego del siglo de oro y mantiene su hegemonía en buena parte de Europa hasta fines del siglo XVI, cuando se fue transformando y diversificando a merced de los cambios espirituales provocados por la evolución social e ideológica de Europa, fundamentalmente al coludir con los principios propugnados por las Reformas (luterana,calvinista, etc.), la Contrarreforma católica, la Ilustración y la Revolución francesa del siglo XVIII. El movimiento, fundamentalmente ideológico, tuvo así mismo una estética, el clasicismo renacentista, plasmada, por ejemplo, en un nuevo tipo de letra, la redonda conocida como letra humanística, imitada de la letra uncial latina antigua, que vino a sustituir poco a poco a la letra gótica medieval.
La expresión studia humanitatis fue contrapuesta por Coluccio Salutati a los estudios teológicos y escolásticos cuando tuvo que hablar de las inclinaciones intelectuales de su amigo Francesco Petrarca; en éste, humanitas significaba propiamente lo que el término griego filantropía, amor hacia nuestros semejantes, pero en él el término estaba rigurosamente unido a las litterae o estudio de las letras clásicas. En el siglo XIX se creó el neologismo germánico Humanismus para designar una teoría de la educación en 1808, término que se utilizó después, sin embargo, como opuesto a la escolástica (1841) para, finalmente, (1859) aplicarlo al periodo del resurgir de los estudios clásicos por Georg Voigt, cuyo libro sobre este periodo llevaba el subtítulo de El primer siglo del Humanismo, obra que fue durante un siglo considerada fundamental sobre este tema.
El Humanismo propugnaba, frente al teocentrismo de la teología escolástica medieval y el canon eclesiástico de prosa, que imitaba el pobre latín tardío de los Santos Padres y el simple vocabulario y sintaxis de los textos bíblicos traducidos, elantropocentrismo y los studia humanitatis, una formación íntegra del hombre en todos los aspectos fundada en las fuentes clásicas grecolatinas, muchas de ellas recién descubiertas entonces, gracias por una parte al trabajo de traductores como Averroes y por otra a la infatigable búsqueda de manuscritos por eruditos humanistas en los monasterios de toda Europa. Este era un latín más puro, brillante y genuino.
En consecuencia el humanismo debía restaurar todas las disciplinas que ayudaran a un mejor conocimiento y comprensión de estos autores, a los que se consideraba un modelo de humanidad más puro que el contaminado por la viciosa Edad Media, para recrear las escuelas de pensamiento filosófico grecolatino e imitar el estilo y lengua de los escritores clásicos, y por ello se desarrollaron extraordinariamente la gramática, la retórica, la literatura, la filosofía moral y la historia, ciencias ligadas estrechamente al espíritu humano, en el marco general de la filosofía: las artes liberales o todos los saberes dignos del hombre libre frente al dogmatismo cerrado de la teología, expuesto en sistemáticos y abstractos tratados que excluían la multiplicidad de perspectivas y la palabra viva y oral del diálogo y la epístola, típicos géneros literarios humanísticos, junto a la biografía de héroes y personajes célebres, que testimonia el interés por lo humano frente a la hagiografía o vida de santos medievales, y la mitología, que representa un rico repertorio de la conducta humana más sugerente para loshumanistas que las castrantes leyendas
piadosas, vidas de santos y hagiografías de Jacopo della Voragine y su leidísima Leyenda dorada. Este tipo de formación se sigue considerando aún hoy como humanista.
Para ello los humanistas imitaron el estilo y el pensamiento grecolatinos de dos formas diferentes: la llamada imitatio ciceroniana, o imitación de un solo autor como modelo de toda la cultura clásica, Cicerón, impulsada por los humanistas italianos, y la imitatio ecléctica, o
...