Principio 10 – 90
Enviado por alexx123456789 • 1 de Octubre de 2014 • Informe • 1.401 Palabras (6 Páginas) • 206 Visitas
Principio 10 – 90
Nosotros realmente no tenemos control sobre el 10% de lo que nos sucede. No podemos evitar que el coche se averíe, que el avión llegue tarde,… lo que tirará por la borda todo nuestro plan. Un automovilista puede obstaculizarnos en el tráfico.
No tenemos control de este 10%. Nos viene dado. El otro 90% es diferente. Nosotros determinamos ese otro 90%. ¿Cómo?... Con nuestra reacción. Tú no puedes controlar el semáforo en rojo, pero puedes controlar tu reacción. No dejes que la gente se aproveche de ti. Tú puedes controlar cómo reaccionar.
Usemos un ejemplo…
Estás desayunando con tu familia. Tu hija tira una taza de café y salpica tu camisa de trabajo. Tú no tienes control sobre lo que acaba de pasar.
Lo siguiente que suceda será determinado por tu reacción. Supongamos que tú maldices, regañas severamente a tu hija porque te tiró la taza encima; ella rompe a llorar.
Después de regañarle, te vuelves a tu esposa y la criticas por colocar la taza demasiado cerca del borde de la mesa. Y sigue una batalla verbal. Tú vociferando vas a cambiarte la camisa; cuando acabas, encuentras a tu hija demasiado ocupada llorando y terminándose el desayuno, para estar lista para la escuela; tu hija pierde el autobús.
Tu esposa debe irse inmediatamente para el trabajo. Te apresuras a coger el coche y llevas a tu hija a la escuela. Debido a que ya vas con retraso, conduces a 65 km/h, cuando la velocidad máxima permitida es de solamente 50 km/h. Después de 15 minutos de retraso y ganarte una multa de tráfico de 100 €, llegas a la escuela.
Tu hija corre a su clase sin decirte adiós.
Después de llegar a la oficina 20 minutos tarde, te das cuenta de que se te olvidó el maletín. Tu día empezó mal; y parece que se pondrá cada vez peor. Estás loco por llegar a tu casa. Cuando llegas a tu casa, encuentras un claro distanciamiento en tu relación con tu esposa y tu hija. ¿Por qué? Pues debido a cómo reaccionaste por la mañana.
¿Por qué tuviste un mal día?
• A) ¿Tu hija lo causó?
• B) ¿El café lo causó?
• C) ¿El policía lo causó?
• D) ¿Tú lo causaste?
La respuesta es la “D”. Tú no tenías control sobre lo que pasó con el café. La forma en cómo reaccionaste esos 5 segundos fue lo que causó tu mal día. Te presento lo que debió haber sucedido: El café te salpica. Tu hija está a punto de llorar. Tú, amablemente, le dices: “Está bien, cariño, sólo necesitas tener más cuidado la próxima vez”. Después de ponerte una camisa nueva y coger tu maletín, miras a través de la ventana y ves a tu hija tomando el autobús escolar. Ella se vuelve y te dice adiós con la mano.
¿Notas la gran diferencia? Dos desarrollos diferentes. Ambos empezaron igual. Ambos terminaron de diferente forma.
Tú realmente no tienes control sobre el 10% de lo que sucede. Pero el otro 90% se determinó por tu reacción.
Aquí están algunas formas de aplicar el Principio 10/90: Si alguien te dice algo negativo acerca de ti, no te lo tomes muy a pecho; deja que el ataque caiga como el agua sobre el aceite.
No dejes que los comentarios negativos te afecten, reacciona apropiadamente, y no arruinarás tu día. Una reacción equivocada podría ocasionar la pérdida de un amigo, ser despedido, te puedes estresar,...
¿Cómo reaccionas si alguien te interrumpe en el tráfico? ¿Pierdes tu carácter?, ¿golpeas sobre el volante?, ¿maldices?, ¿te sube la presión? ¿A quién le preocupa que llegues 10 segundos tarde al trabajo? ¿Por qué dejar que los coches te arruinen el viaje?
Recuerda el Principio 10/90 y no te preocupes.
Tú has dicho que perdiste el empleo. ¿Por qué perder el sueño y ponerte enojado? No funcionará. Usa la energía de preocupación y el tiempo, para encontrar otro trabajo.
El avión está atrasado. Va a arruinar la programación de tu día. ¿Por qué manifestar frustración con el encargado de la aerolínea? Él no tiene control de lo que está pasando. Usa tu tiempo para estudiar, conocer a otros pasajeros. ¿Por qué estresarse? Eso hará que las cosas se pongan peor.
...