¿Qué es México para el mundo?

“Traición y lealtad, crimen y amor, se agazapan en el fondo de nuestra mirada. Atraemos y repelemos” (Paz, 1959)

¿Qué es México para el mundo? Para muchos México es un país lleno de colores y sonrisas, para otros un país de crimen y corrupción, una reputación que con mucho o poco esfuerzo nos hemos ganado a lo largo de la historia.

Pero lo que realmente nos debería de preocupar no es nuestra reputación en el exterior, en los que nos debemos enfocar es en ¿Qué es México para los mexicanos?

Indudablemente la perspectiva que tengamos de nosotros mismos la vamos a reflejar al resto del mundo.

Meses atrás celebramos con el mundo 200 años de independencia, de libertad, de orgullo nacional, nos pusimos ropa tradicional, de una cultura a la cual no conocemos y bebimos nuestra famosa bebida nacional, el tequila, sin saber que ya no es nuestro, que los rendimientos del corazón de Jalisco, salen de nuestra fronteras para enriquecer a empresarios extranjeros, los cuales probablemente saben más de la cultura de México que nosotros mismos.

Es de esperarse que con la situación actual del país, nos preocupemos mas por el crimen organizado, que por conocer quiénes somos realmente, pero hasta que punto ¿estamos dispuestos a perdernos en un mundo en constante cambio?

En este ensayo desarrollare lo que a mi parecer son los principales obstáculos para nuestra cultura.

México vecino de la gran potencia mundial

Ser vecino de Estados Unidos, no es algo fácil, pues no es solo compartir una frontera, es administrarla conjuntamente. Cada vez es más significativo el número de mexicanos que se van en busca del sueño americano, con ellos se llevan parte del país, de nuestra cultura, la cual lamentablemente se va perdiendo o mezclando, hasta crear nuevas tendencias, que después de una forma u otra regresan a México, deteriorando aun mas nuestra tradición.

El intercambio comercial que tenemos con Estados Unidos, vas mas allá de ser bienes y servicios, de alguna manera estamos dando nuestra esencia, volviéndonos más dependientes de un país sin cultura y sin tradición.

Cada vez hay más empresas extranjeras operando en nuestro territorio, empresas que vienen en busca de mano de obra barata, la cual encuentran al por mayor. Estos empresarios de alguna u otra manera agotan no solo nuestra mano de obra, sino también nuestros recursos naturales, su gran discurso acerca de su pensamiento verde y su apoyo al desarrollo no parece tener más futuro que aquella hora de entrevista con el gobierno anfitrión, al cual con tal de asegurar la inversión extranjera parece no importarle mucho.

Mas que inversión nuestra sociedad necesita educación.

Esta relación es de mucho beneficio para nuestro país, sin embargo deberíamos de poner más atención e la relación que México mantiene con México

Desigualdad

La desigualdad no solo se da en términos macro, Norte-Sur, sino también micro, podemos ver esa desigualdad tan marcada en nuestro país, estado o ciudad.

Nos decimos una nación multicultural, pero la práctica deja mucho que desear. Tal vez sea el miedo a lo desconocido o simplemente la ignorancia lo que nos lleva a esta práctica de desigualdad, la cual no es nueva en este país, un claro ejemplo de esto lo tenemos en nuestra propia ciudad. La calzada se conoce como la brecha que se para a los de “aquel” lado y los de “acá”.

“Aquel” lado obreros y campesinos, “acá” alta costura y trajes, esto es solo un ejemplo de lo que se puede observar, pero las diferencias más grandes son aquellas que no podemos ver a simple vista. Lo que hay en el interior de las personas, el anhelo de partencia a una vida mejor, el hambre, el frio, estos son los signos más preocupantes de nuestra sociedad, pues son estos los que poco a poco nos llevan a comprometer nuestra identidad.

Discriminación

Zapotecas, nahuas, mayas, purépechas, huastecos, todos estos grupos étnicos han sido de una u otra forma blanco de discriminación dentro de nuestra sociedad.

Es realmente absurdo que nuestra sociedad piense que la única manera en la que los indígenas podrán mejorar su calidad de vida sea dejando de ser indígenas.

Las estadísticas que salen año con años acerca de estos grupos son verdaderamente trágicas, “la tasa de analfabetismo entre indígenas es de 24.6 por ciento,

Mientras para los no indígenas es de 6.4 por ciento; la esperanza de vida es cuatro años

menor que entre

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