Reflexión Sobre El Mal Y La Libertad Como Conceptos Inherentes Al Desarrollo Natural Del Ser Humano

A través de las décadas han surgido diversas situaciones que han determinado las características de un concepto con alto grado de subjetividad. Es preciso puntualizar que a éste se le conoce como mal. Por ello, este ensayo funge como una síntesis de cada una de las perspectivas de algunos filósofos y pensadores, estudiados en el curso, con el fin de sintetizar y reflexionar el por qué de su existencia y su aplicación en la actualidad. Además, en su análisis se reconoce la implicación de la libertad, por lo que es fundamental referir a este concepto para determinar si el mal surge a partir de las decisiones humanas mediante un interés individual o de manera natural, contemplando su desarrollo como ser social.

El mal y la Libertad

El mal se ha considerado como una característica esencial relacionada con el hombre desde la época Griega, en la que las explicaciones ante el tema del Caos radican en sus efectos. Los mitos, funcionan como herramientas que explican por qué suceden esas expresiones negativas. De la misma manera, surgen los relatos que narran historias vinculadas al pesimismo. Un ejemplo de ello se expone en la Teogonía Hesiódica, donde la caja de Pandora resguarda y libera una gran cantidad de males como enfermedades y dolores. Sin embargo, se reconoce la existencia de dos polos donde radica el mal. De forma ética, se contempla que el hombre es el responsable del mal, ya que lo lleva de manera intrínseca. Mediante sus acciones libres, decide entre las opciones presentes para crear un destino propio. Por otra parte, de forma trágica, se considera que el mal proviene de una fuerza superior ante la cual, la voluntad humana no puede reaccionar con fuerza a pesar de su valentía. Entonces, ¿por qué existe el mal? ¿Acaso es decisión del hombre cometer actos malignos o surgen a partir de su debilidad natural? A pesar de esas cuestiones, es claro que en la sociedad, el hombre debe hacerse responsable de los efectos de sus acciones a partir de una decisión, ya que esta puede determinar el éxito o fracaso individual. Es por ello, que muchos hombres no desean adquirir el poder que deriva de la libertad y de las oportunidades de elección que ésta ofrece.

Ante ello, se identifican argumentos que explican por qué las personas no han elegido el camino del bien. Esto se debe a que no lo perciben. Según Sócrates, todo aquél que conoce el bien, necesariamente lo practica. Por eso, refiere a las personas que no lo hacen, como ignorantes. Cabe mencionar, que es necesario que busquen ese tipo de conocimientos, ya que sólo así podrán orientarse a sí mismos posteriormente. Cuando se niegan a hacerlo, propician el surgimiento de las tragedias y exponen sus limitantes como hombres teóricos en sociedad. Es decir, se reflejan, según Sócrates, como artistas que adquieren el mal como parte su vida asumiendo las penas sin buscar una solución. Por otra parte, al morir este filósofo, Platón retoma nuevas reflexiones ante el tema. Considera que el poco bien que se realiza se hace mal y el mucho mal que se realiza se hace muy bien. La sociedad ha influido en esas aseveraciones, generando un ambiente egoísta y de deseos posesivos. Por ello, el bien radica en los momentos que cada individuo pasa consigo mismo, reflexionando para evadir los males del exterior social. Sin embargo, ¿es esta postura la más adecuada para un ser que por naturaleza es social? ¿No es el intercambio de conocimiento, lo que enriquece la calidad humana? El contexto social varía y por ende, los seres humanos que habitan en él se

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