Resumen del Hombre más rico de Babilonia
Enviado por Christian André Milla Vallejos • 7 de Septiembre de 2021 • Resumen • 3.886 Palabras (16 Páginas) • 360 Visitas
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FACULTAD DE INGENIERIA Y ARQUITECTURA
ESCUELA PROFESIONAL DE CIENCIAS AERONÁUTICAS
“EL HOMBRE MAS RICO DE BABILONIA”
Curso
“INTRODUCCION A LA ECONOMIA”
Ciclo 2019-II
Docente
Cesar Augusto Llontop Valdiviezo
Alumno
Milla Vallejos, Christian André
LIMA - PERÚ
2019
INTRODUCCION
En este breve trabajo, se resumirá capítulo a capítulo que se puede encontrar en la obra “el hombre más rico de Babilonia. Como tema principal veremos cómo es que cualquier persona puede a lograr ser poseedor de una rica inmensa o quiera tener una comodidad económica en que el dinero no deba ser un problema. Con breves relatos de los diferentes personajes apreciaremos como es que logran llegar a ser ricos e impartir sus enseñanzas a las personas que realmente desean lo mismo
EL HOMBRE MAS RICO DE BABILONIA
Capitulo I. El hombre que deseaba oro
En este capítulo conocemos a Bansir, un hombre que elaboraba carruajes para la gente rica de Babilonia. Bansir se encuentra triste porque ve que pese a todos sus esfuerzos no puede llegar a ser rico, reclama tanto del porque a pesar que trabaja noche y día, que se esfuerza más que nadie en lo que hace puede lograr lo que anhela. Deja de hacer sus deberes y empieza a analizar las riquezas del lugar de donde vive. En eso aparece el mejor de sus amigos Kobbi, era un músico, que toca la lira y vive de eso. Al encontrarse ambos, este piensa que Bansir era un hombre adinerado ya que lo vio sentado en un muro sin hacer nada y le pide que le preste. Bansir al escuchar eso le dice que no tiene dinero y que tiene la bolsa vacía al igual que él. Y empieza a decirle todo lo que piensa respecto a las riquezas y a cuestionar que les faltaba para poder conseguir ser ricos ya que estos dos se esforzaban en lo que hacían. Kobbi se pregunta si es que hay un secreto en dichas personas ricas y menciona a Arkad, un buen amigo que logro ser rico y al parecer se el hombre más rico de Babilonia, entonces les nace la idea de ir donde este a pedir dicho consejo para poder lograr lo que siempre han deseado.
Pero antes de hacer esto, Bansir le dice a Kobbi para avisar a sus otros amigos que son pobres para ir todos juntos y pedir dicho consejo al hombre más rico de Babilonia.
Capítulo II. El hombre más rico de Babilonia
En este capítulo van en busca de Arkad, para poder escuchar el secreto de cómo llegar a ser una persona rica. Cuando llegan a él exclaman que era un hombre muy afortunado a lo que él responde: la suerte es una diosa maligna que te lleva a lo malo. Si es que logras ser rico de forma afortunada, te vuelves una persona mezquina, que no gasta, que cuida su tesoro y no disfruta de aquello y si es que lo recibes de herencia causa solo que despilfarres el dinero y solo te ocupes en gastar y no producir. A lo que ellos preguntan de como él, siendo tan igual que ellos que jamás había sido más en la escuela, que estudiaron con el mismo maestro y que jamás hubo diferencias, como es que él podía poseer tanto.
Arkad responde aquella pregunta con historias suyas, de como él trabaja tanto para poder conseguir lo que quería, que se esmeraba al igual que ellos y no conseguía resultados, que todas todas sus ganancias eran absorbidas por las necesidades que se le presentaban. Hasta que un día entra un prestamista entra al taller de grabado donde él trabajaba, dicho prestamista ordeno una copia y tenía que terminarlo en dos días, pero Arkad no lo terminó ya que lo que había pedido era muy largo. Cuando Algamish, el prestamista, vuelve a recoger el grabado se dio con la sorpresa de que no estaba culminado. A lo que Arkad responde que él lo terminaría al día siguiente cuando saliera el sol, pero si este le daba el secreto para ser rico. Algamish acepto y al día siguiente encontró el grabado acabado y dándole el secreto a Arkad “una parte de todo lo que ganas es tuya para ahorrarla “que era como un árbol, que la primera moneda que ahorraba era como la semilla y a medida que iba ahorrando el árbol crecería para luego brindarle sombre. él no entendió bien, y Algamish le explico lo que tenía que hacer. Que de todo lo que ganaba siquiera la décima parte lo ahorre durante un año y con genere más dinero. Y así lo hizo, luego de un año el prestamista vuelve y le pregunta cómo le fue a lo que Arkad respondió que había hecho lo que le dijo y con el dinero que ahorro mando a comprar joyas a un ladrillero que se iba de viaje. El prestamista le explico que había arrancado a su árbol desde la raíz ya que no era posible de que mandara a u ladrillero a comprar joyas y pues fue cierto ya que lo habían estafado. Le dijo que lo volviera a hacer y se fue. Al cabo de dos años Algamish vuelve y le pregunta cómo le fue, Arkad le responde que había conseguido intereses de sus ahorros y que con eso se daba festines a lo que el prestamista le dijo, no comas a los hijos de tus ahorros. Pues pasado el tiempo lo entendió. Algamish ya mayor pide a Arkad que administre algunos de sus bienes y es así como empezó a tener riquezas. Al concluir con su relato algunos de los amigos que asistieron no entendieron, otros creían que les estaba mintiendo y otros que realmente habían encontrado una luz y que estos últimos volvían para escuchar más consejos.
Capítulo III. Los siete remedios para una bolsa pobre
El rey Sargón se encuentra preocupa porque hay mucha pobreza en la rica Babilonia y no sabe qué hacer, entonces habla con su canciller sobre esto y pretende que alguien enseñe a los maestros sobre cómo llegar a ser rico. Entonces pregunta quién es el hombre más rico de la ciudad y este nombra a Arkad y lo mandan a traer ante el rey. El rey pide la ayuda de Arkad y este con mucho gusto acepta dicho trabajo. Seleccionan a cien personas de diferentes profesiones para que sean instruidos por Arkad. El día uno Arkad empezó preguntando a cada hombre su profesión y haciéndoles entender que, al igual que él, cualquiera puede llegar a ser rico. Contó sus experiencias y de cómo tuvo pérdidas y cómo llego a tener ganancias por primera vez. Arkad dijo que les enseñaría siete remedios para una bolsa vacía. El primer remedio “comenzar a engordar tu bolsa” que hablaba prácticamente del ahorro, la segunda “control de los gastos” que era saber en qué gastar y no despilfarrar el dinero, “hacer que el oro se multiplique” hacer que el oro trabaje para nosotros y tener ganancias, “proteger tus tesoros de posibles pérdidas” saber en lo que se va a invertir o donde se va a poner el dinero, “haz de tu morada una inversión provechosa” tener un buen lugar donde vivir hace que nos sintamos bien y confortables, no solo nosotros también nuestra familia, “asegurar un ingreso en el futuro” para la vejez o una posible muerte, no dejar desamparada a la familia, “aumentar las habilidades para ganar dinero” la constante preparación, aprendizaje te hará errar menos y ser más eficiente para poder conseguir frutos. Y es así como Arkad, debido a su amplia experiencia saco esos siete remedios para sus estudiantes.
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