Siddharta
Enviado por CAMILAcevedo27 • 4 de Abril de 2013 • 735 Palabras (3 Páginas) • 562 Visitas
PRIMER CAPITULO.
En este capitulo se describe siddharta, como era el dia en que nació,
Que creció a lado de su amigo Govinda, con el sol a la orilla del rio.
Que el iba a las reuniones de los sabios, el orgullo que sentía su padre al verlo,
con la inteligencia, con las ancias de saber mas.
La alegría que sentía su mama al verlo, cuando lo veía caminando y como
saludaba con tan perfectos modales.
Pero que Govinda era el que mas lo adoraba, su amogo, el deseado hijo de
Brahmán. Que sentía afecto por Siddharta, le gustaba su calida voz, pero
Algo que amaba ma s era su gran inteligencia.
Que Siddharta no seria cualquier sabio, sacerdote malvado y tampoco un
Orador vacion y vanido.
A todos daba alegría y gozo, pero Siddharta no se sentía igual, se sentía raro, al
caminar en cielo azul.
Aveces se le aparecían sueños, donde lllego a ver la corriente del rio.
Empezó a comprender que el cariño de su madre, de su padre, y de su amigo,
no lo harian feliz toda su vida.
Siddharta conocía a muchos abrahmes pero ninguno como su padre, el era limpio, su vida era pura y su comportamiento era sosegado.
Siddharta empezaba a dudar de todo lo que sabia.. de que servia? Todo lo que el había aprendido?..
Esos eran sus pensamientos de siddharta, no había saciado su ultima sed.
Ese dia Govinda le dijo a su amigo Siddharta, vamos a la higera de los bainos, para
practicar el arte de la meditación, llegaron a la higuera de los bainos, y se sentaron, estaban
a 20 pasos de distancia y govinda esta dispuesto a decir el Om, mientras Siddharta repetía el verso murmurando....
Un dia, pasaron por la ciudad pasaron unos samanas, asceta peregrinos, eran tres hombres
ni viejos ni jóvenes, sus hombros estaban ensangrentados y llenos de polvo, detrás de ellos
venia un ardiente halito de silenciosa pasión.
Por la noche después de la comtemplacion Siddharta declaro a Govinda.
Mañana en la madruga, amigo, Siddharta ira con los samanas.
Govinda se puso palido al escuchar esas palabras y al leer con la cara inmóvil, con la
decisión de su amigo imposible se desviar. Govinda en ese momento se dio cuenta de que
Siddharta lo encaminaría a despertar su camino hacia su destino. Siddharta le pidió
permiso a su padre para ir con ascetas y dijo quiero convertirme en un sama, espero mi padre no se oponga. Entonces el brahmán se quedo en silencio
CON LOS SAMAS
Ese mismo día por la noche, los alcanzaron los ascetas y les ofrecieron su obediencia.
Siddharta los acepto, el regalo su túnica a un pobre, y el solo vistió arapos, no comio
durante 15 dias. La carne de sus mejillas desapareció.
Sus sueños ardientes osilaban sus ojos, en sus dedos
...