Un Mundo Para Julius

3.- Country Club (tercer capítulo):

Este capítulo comienza con la mudanza de Julius, Susan, Juan Lucas y Bobby al country club, hasta que su nueva casa esta lista. Pero Bobby casi no estaba en el club, porque ya tenía autorización para manejar la camioneta solo e iba a buscar casi a diario a Peggy (una chica canadiense que había conocido y que le gustaba mucho). Por la piscina ya la mayoría de chicos se conocían y había un grupo que era el de los chicos del barrio Marconi, que siempre estaban alrededor de la piscina fumando y siempre estaban con sus novias, a las que siempre vigilaban porque no querían “cachudos” en el barrio, eso sí que no. Un día Julius entrando a su cuarto, ni se imagino que se encontraría con dos chicos besándose en la puerta de su cuarto, eran dos chicos llamados Cecilia y Manolo que al verlo solo les causo risa, en especial a Cecilia, quien no dejaba de reír. Llegó el momento en que Susan les avisó a los empleados

que tenían vacaciones pagadas sin trabajar hasta que el nuevo palacio estuviera listo, menos a Carlos que tenía que estar con ellos por si querían ir a algún lado y Arminda que tenía que llevarle al señor sus camisas limpias una vez por semana. Ella una de esas semanas se acordó que era cumpleaños de Julius y cuando fue a dejar las camisas le preparó un regalo a Julius que cuando este lo recibió pensó que no podría usarlo, porque eran unas medias muy feas y una colonia que parecía una botella simple llena de agua, pero igual lo recibió de buenas maneras. Susan le había prometido a Julius llevarlo a comer al Aquarium por ser su cumpleaños, pero ella y Juan Lucas tenían que ir antes a un coctel, así que podía acompañar a Carlos a dejar a Arminda a su casa, a quien no le agrado mucho la idea pero por ser cumpleaños de Julius los llevó. Mientras tanto Juan Lucas y Susan se fueron a la inauguración de la casa de cristal, una casa de unos conocidos suyos que eran Ernesto Pedro de Altamira y se esposa, Finita. Cuando llegaron ahí también estaba Juan Lastarria, pero sin su esposa, porque ahora le avergonzaba mucho salir con ella, así que prefería dejarla en casa. Había muchos invitados ahí, como el historiador más culto del Perú, que era Lalo Bello. También había una joven, que

era sueca y estaba sentada cerca de una lagunita que conversaba alegremente con Juan Lucas, cosa que no le agrado mucho a Susan. También estaba el arquitecto (que estaba enamorado de Susan) y que había hecho el nuevo palacio en el que vivirían. Luego de un rato Juan Lucas le recordó a Susan que Julius los estaba esperando y tuvieron que irse. Juan Lucas conducía muy rápido, Susan no le pedía que bajara la velocidad, y en ese instante empezó a recordar muchas cosas de su vida, como había conocido a Santiago su esposo, etc. Luego llegaron al hotel a recoger a Julius para ir comer, pero se fueron rápido porque Susan estaba muy cansada, y Juan Lucas se fue a un bar cercano con la sueca que lo esperaba en su auto. Cecilia y Manolo se habían hecho muy amigos de Julius y estaban cerca a la piscina junto a él. Había un chico al que le decían el gringo y el finalmente le había quitado su novia a uno de los chicos del barrio Marconi, y mientras Julius los veía en la piscina, sentía como uno de los veranos más largos de su vida se acababa y así empezaba todo el ajetreo de medirle el uniforme y todo eso porque empezaba un nuevo año escolar y se venía también con esto la mudanza al nuevo palacio, que estaba ya casi listo.

4.- Los grandes (cuarto capítulo):

Este capítulo inicia con

el regreso de Julius a la escuela. Cuenta sobre los chicos de la escuela y que todo empieza a tornarse mal para Cano, un niño pobre que luego de no haber podido dar tanto dinero para las misiones como los demás, es excluido y luego invita a Julius a su casa al ver que es el único que lo ayuda. Luego, Susan le pone una profesora de piano particular, que se llamaba Frau Proserpina, a quien Juan Lucas llama la nieta de Beethoven. Julius asistía a sus clases con Frau Proserpina llevado por Carlos. Ese lugar era muy sombrío, cuando pasaba por los demás cuartos vio a dos chicas estudiando, a un señor arreglando máquinas de escribir y otra chica que le pareció muy bonita. Frau Proserpina era muy amargada, y siempre le exigía perfección en sus ejercicios, comparándolo con sus demás alumnos. Un día el arquitecto anunció que ya todo estaba listo para la mudanza y Juan Lucas llamó a los botones para que ayudaran con las maletas para poder llevarlas al nuevo palacio. A esa nueva casa regresaron Celso, Daniel, Carlos y Arminda, luego hubo una larga selección de niñera y de cocinera para la nueva casa. Así fue como llegaron Flora (La decidida) y Abraham (un cocinero recomendado por amigos de Juan Lucas). Un día cuando Julius termino sus clases con Frau Proserpina, se dio cuenta de que

nunca veía al alumno que salía antes de él, y nunca veía entrar al que seguía tampoco, entonces empezó a sospechar y luego se encontró con el señor calvo, él le dijo que era filatelista y que coleccionaba sellos del correo, y cuando Julius le comentó que Frau Proserpina era la nieta de Beethoven, el se empezó a reír y dijo que ella era una vieja sola y amargada y que él era su único alumno. Entonces lo llevó a ver el supuesto recital que Frau Proserpina daba, pero solo para sus mejores alumnos, y se dio cuenta en el recital, que efectivamente él era su único alumno, pero al darse cuenta Frau Proserpina de que la estaban espiando, entonces los hecho a ambos y le dijo q Julius que no volvería a tener clases de piano y le dijo al señor que lo echaría a la calle (porque ella era la arrendadora de ese edificio), pero que por ser invierno dejaría que se quede un tiempo más porque en invierno no se echa a nadie a la calle. Cuando Julius regresaba a su casa, Carlos se apresuró a tocar la bocina para que le abrieran la puerta y pensó que como en una casa tan grande no habían podido comprar una puerta automática. Julius al bajar del auto, se dio cuenta de que había una carroza hay en la casa, cosa que le extraño mucho, pero en ese momento llegó la decidida y se lo llevó para limpiarle

el uniforme y le dijo que tenía que cambiarse rápido para ir a hacer sus tareas. Después Julius vio que adentro en su casa estaban conversando Juan Lucas, Susan y otro señor mas que él no conocía, y al acercarse lo presentaron, le dijeron que era Capone y Julius de inmediato se dio cuenta de que era el papa de Fernando, hijo del embajador del Perú en Argentina. Cuando la profesora les había pedido que hagan un informe sobre algún acontecimiento o personaje que los haya impactado en los últimos meses, Julius habló sobre Ranchal Capone, papá de Fernandito, y lo hizo quedar en ridículo, cosa que molesto mucho a

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