Una mentira repetida adecuadamente mil veces se convierte en una verdad

“Una mentira repetida adecuadamente mil veces se convierte en una verdad” (Joseph Goebbels); en qué medida está de acuerdo o en desacuerdo con esta afirmación

Según la Real Academia Española, uno de los significados de la palabra verdad es “un juicio o proposición que no se puede negar racionalmente”^[1], pero el problema  es el raciocinio de la persona a la cual se le narra la verdad. Si se logra convencer a la gente sobre algo, las personas se encargarán de eliminar las ideas que descalifican esta “verdad”, como cuando la  Santa Inquisición castigaba, con el apoyo del pueblo, a quienes  osaran demostrar que estaban equivocados. A lo largo de la historia, la llamada “clase especializada”^[2], ha utilizado la propaganda como un medio para manipular “al rebaño desconcertado”^[3] y esto se puede apreciar claramente en la obra como nos venden la moto de Noam Chompsky e Ignacio Ramonet, que narra precisamente eso, como se manipulan a las masas.

El propósito de este ensayo es sustentar el porqué y el cómo, la frase del genio maquiavélico de la propaganda nazi, es cierta en gran medida; una mentira mil veces repetida  se puede convertir en verdad, para un amplio grupo de personas y que hasta la propia sociedad lo asuma como cierto, pero esto no lo puede hacer por siempre. Por este motivo, se realizará este ensayo basado en la historia como área de conocimiento.

Para que una falsedad logre convertirse en una “veracidad”, se necesitan dos cosas: uno, habilidad para repetir la información y dos, que el oyente no sea muy instruido (esto le facilita mucho las cosas a la propaganda). No solo es necesario rpoder difundir reiteradas veces la información, también es necesario hacerlo de la forma correcta, tocando temas muy sensibles en las personas como el nacionalismo, terror a la destrucción,  la religión, etc. Un claro ejemplo de esto se puede apreciar en la época de las Cruzadas, cuando se usó a la religión y la defensa del cristianismo, (también se ofreció la salvación eterna para todos los que irían a pelear) para atacar a los musulmanes; les infundieron  a los cristianos europeos un profundo odio hacia personas que ni siquiera conocían y que se encontraban a cientos de kilómetros de distancia.

El otro punto que hace efectiva la propaganda es que el público objetivo, no posea amplios conocimientos y no utilice eficazmente la razón. Esta vez, también utilizaremos a la Europa cristiana; el pueblo era en su gran mayoría analfabeto y sin educación, por lo cual, este no tenía como desmentir lo que la iglesia decía sobre el mundo en el que vivían. Pero como sucede en la mayoría de casos, cuando la ciencia progresó, se desmintió un gran número de argumentos que la gente de la época veía como irrefutables.

El pensamiento de las sociedades a lo largo de la historia ha mostrado que los humanos podemos ser influenciados con suma facilidad, esto pareciera ser una característica  del homo sapiens caer en supersticiones infundadas. Las personas durante siglos pensaban (algunas lo piensan todavía), que las calamidades, epidemias y desastres naturales se debían a la  desobediencia a Dios o a los maleficios de brujas, y la ciencia ha demostrado que estos fenómenos tienen un origen y explicación científica; tal vez Dios sea el causante, como lo argumentan algunos creyentes, pero todavía no se ha encontrado evidencia de ello, ni siquiera existen argumentos irrefutables, más allá de la Fe, de la existencia de un Dios todopoderoso.  En este caso, simples rumores y creencias llevaron a las personas al límite de mandar a la hoguera a un gran número de hombres y mujeres por refutar la existencia de un Dios.

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