VIaje A Londres

1984, de George Orwell. Es una historia que se desarrolla en un estado totalitario, en el que el poder manipula y controla absolutamente todo lo que se refiere al pueblo. La continua vigilancia a la que todos son sometidos llega a tal importancia que incluso interviene en los sentimientos y acciones más íntimas y primitivas. Para este estado, lo más importante es el poder, con lo que todo es sacrificable para conseguirlo.

Winston Smith el protagonista de la novela aparece como símbolo de la rebelión contra el poder político. Su relación con esa chica desafía las leyes, pues además de sexo, hay sentimientos. Estos son algunos puntos que son igual que en Un mundo feliz, que todo está controlado, y las personas no pueden pensar por si mismo. Winston Smith, sería una especie del Salvaje, ambos mantienen sus ideales.

Otra de las obras es Fahrenheit 451, de Ray Bradbury. Es la temperatura a la que el papel de los libros se inflama y arde Fahrenheit 451. Este libro cuenta la historia de un futuro muy distinto a la época en la que vivimos ahora, teniendo en cuenta, que actualmente, una de las cosas más importantes en las personas es su inteligencia y para ello, los libros lo son todo. Pues en este futuro, eso no parece importar demasiado, ya que lo más importante es que las personas sean “felices” o al menos, que crean serlo, y por ello la lectura de libros es algo que está totalmente prohibido ya que creen que eso obliga a la gente a pensar, y eso no es nada bueno para un mundo en el que se quiere que todos sean “felices”.

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