ÉTICAS TEOLÓGICAS

ÉTICAS TEOLÓGICAS

Aristóteles presenta un análisis ético de la felicidad del ser humano como objetivo de vivir. La felicidad es vista como actividad del mismo ser humano, la

cual se expresa como virtud. La ética, según el mismo autor, trata de orientar a las personas hacia la realización de la plenitud en cuanto a la naturaleza del

ser humano como tal y por esto, trata de explicar lo que en realidad significa o debe significar el sentido de la felicidad para una persona, en su afán por

realizarse en su diario vivir independientemente de donde pertenezca o creencias tenga. Lo anterior porque existe un problema ético, el cual radica en que no

para todos los seres humanos la felicidad significa lo mismo e incluso en muchas ocasiones, significa completamente lo contrario. Desde el punto de vista de

Aristóteles, las personas pueden presentar tres distintos ideales de felicidad: personas entregadas al placer que obedecen nor mas por temor, personas con

carácter prudente y de vida en la ciudad, personas sabias que llevan una vida contemplativa, siendo este último el más correcto de acuerdo con el autor.

Epicuro por su parte, orienta la felicidad hacia el placer y plantea que los seres humanos juzgan la mayoría de lo que les rodea, de acuerdo con el dolor o

placer que esto le ocasione. Para tener una vida placentera, se debe evitar todo aquello que pueda generar dolor, no sin antes tener una visión muy clar a de lo

que en realidad significa una vida con estas características. La muerte no debe ser causa de perturbación en las personas, pues cuando llega priva de toda

sensación incluyendo toda aquella que pueda generar dolor; razón por la cual el ser humano debe centrarse en buscar la dicha de una vida plena mientras ésta

se tenga. Epicuro también indica que debe hacerse una distinción entre los placeres, colocando a los corporales (necesid ades básicas) como principales

seguidos de los de la mente, los cuales limitan el deseo insaciable del cuerpo. La felicidad no está relacionada con la parte política, puesto que ésta no se

subordina a la comunidad sino que más bien se pone al servicio de los demás.

Utilitarismo: Teoría propuesta por Bentham, quien explica que la búsqueda de la felicidad debe ser para el mayor número de individuos posibles. El bien

común debe estar presente, razón por la cual las acciones y hechos se evalúan bajo el criterio de qué tanto benefician o perjudican a un determinado grupo de

individuos, incluyendo animales. Todas las preferencias de los involucrados deben ser consideradas, tomando a todas con igual nivel de importancia. El

utilitarismo muestra la felicidad como un hedonismo cuantitativo, en donde prevalece la búsqueda de la mayor cantidad de placeres posibles y el mínimo de

dolor posible, de acuerdo con Bentham.

Por otra parte, Mill propone un hedonismo cualitativo porque para él, al haber placeres mayores que otros su búsqueda debe ser prioridad, cambiando la

orientación del utilitarismo hacia la satisfacción que prefiere la gente. El problema

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