El Kindergarten

Peabody cría que los jardines de niños trataban a los niños como autómatas, como máquina de aprender, y no como niños espontáneos, curiosos, activos e impresionables. Pidió a los maestros que trataran a sus pupilos como niños en sociedad, una comunidad o republica de niños. También pensaba que lograban un desarrollo social e intelectual por medio de juegos, música y gimnasia.

Los reformadores esperaban que el kindergarten fuese una cura para los males de la sociedad urbana.

Señoras de sociedad en las grandes ciudades por toda la nación se dedicaron a trabajar en los kindergartens como misión social para salvar a los niños.

En 1903, siendo comisionado de Educación de los Estados Unidos, Harris escribió: el kindergarten es realmente esencial para la salvación de los niños de las barriadas, es decir, para los hijos de las tres clases más débiles de la sociedad.

Algunos educadores creyeron que le kindergarten, con su objetivo de adapta la educación a los niños, y no los niños a la escuela, suavizaría y gasta fundaría el rígido y uniforme programa y la instrucción que se habían estandarizado en la escuela primaria graduada.

Las maestras trataron e unir el hogar con la escuela para los niños, ofreciendo una atmosfera casi maternal y hogareña en el aula, pero el nuevo programa que habían implementado lo hacía virtualmente imposible pasar mucho tiempo en los hogares de sus pupilos.

Cuando los supervisores contrataban maestras, decían que en ellas buscaban: comprensión, simpatía y saber ver desde el punto de vista del niño y espíritu de juego.

Los maestros de primaria opinaban que aquellos niños que llegaban a ellos cursando el jardín de niños eran mas alertas y observadores que aquellos que no asistían, que además, aprendían a ser puntuales y constantes en su asistencia, a seguir consignas y a jugar de manera limpia.

Los superintendentes de las grandes ciudades y juntas escolares buscaban medios para alinear el kindergarten con los primeros años de primaria.

Por la influencia de la cien surgida ciencia de la psicología, se pedía a los maestros que tuvieran una secuencia de desarrollo, este enfoque restaba importancia al simbolismo y a las técnicas pedagógicas específicas de Froebel. Después de esto, tomaron los métodos de Hall.

Algunos estudios mostraban que los graduados del jardín avanzaban con mayor rapidez y obtenían mejores calificaciones en las pruebas estandarizadas, mentales y de aprovechamiento, que quienes no lo cursaron, esto era la prueba del éxito de la nueva reforma.

Los observadores iban descubriendo que cada vez se reemplazaban más los pupitres por mesas y sillas móviles, donde se podían realizar juegos en grupo, y el jugo como complemento del aprendizaje.

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