Imperialismo Estadounidense

El imperialismo norteamericano....... el gran flagelo para los pueblos latinoamericanos

El imperialismo no tiene otro nombre que la práctica empleada por las naciones o pueblos poderosos para ampliar y mantener su control o influencias sobre las naciones o pueblos más débiles. Es ésta la definición menos ambigua que tiene el término, con esta tesis quiero comenzar a exponer en contra del imperialismo, con el objetivo de demostrar los abusos cometidos contra aquellos países subordinados por la hegemonía de los más poderosos; existen diversos factores de dominio, como: sociales, culturales, demográficos, económicos, políticos, entre otros..... Es así como se ejerce el dominio completo de los países más poderosos como se demostrará en la siguiente argumentación.

Los países más potentes económicamente van hacia otros países más débiles con el objetivo de generar ganancias a través de todas las riquezas que posee el país pequeño. Remontémonos al caso del Colonialismo Español en América...... ¿existe alguna justificación para los abusos cometidos contra toda la comunidad indígena americana? Esta retórica no necesita respuesta, ya que todos conocemos las riquezas formadas por el reino español a costa de la población sudamericana (esto es a modo de ejemplo). Ya que el caso que deseo ponerle mayor énfasis es un caso actual, de una potencia hegemónica, el mundo unipolar actual tiene una superioridad, que es desequilibrante en el mundo global (lamentablemente para todos, porque el mundo necesita equilibrio urgente), el país señalado son los Estados Unidos.

Con la derrota del comunismo y la derrota de la URSS, en el mundo se ha visto el surgimiento de la potencia señalada, es el llamado “imperialismo yanqui” que con la expansión de su capitalismo ha dominado al planeta entero, así este capitalismo salvaje asume y la pone en práctica, en beneficios de sus miserables intereses. Los más fuertes vencen a los débiles, los explotan, los enajenan, los asimilan como factoría o colonia. El poder de un imperio se cimenta en sus riquezas y en su poderío militar. Las riquezas las consigue de la explotación de los pueblos sometidos y de la apropiación de sus riquezas. La fuerza militar les sirve para defender los territorios ocupados y la riqueza malavenida, y evidentemente, para acrecentar esta ultima.

Estados Unidos logró su independencia en 1776, principalmente debido a un detestado paternalismo Inglés frente a sus 13 colonias en América. Mientras no formaban parte del parlamento inglés, en lo económico también habían sido perseguidos por sus metrópolis, a través del monopolio del té y el alza de determinados impuestos. Esto atentaba contra los principios libertarios de la ilustración que se habían arraigado hondamente en EE.UU., ya que no podían explotar todo su potencial económico y surgir cuanto querían, debiendo enviar dineros a un reino inglés que los despilfarraba en guerras.

Fue así como, desde una inconsciente jugarreta en la fiesta del té, EE.UU. decidió independizarse totalmente de sus metrópolis. La ilustración fue su bandera de lucha la que encarnaban el liberalismo económico (aventureros), la libertad e igualdad de los hombres en el aspecto político, la utilización de la razón como máximo exponente ideológico. Pero los estadounidenses, luego de su independencia pensaron que no les bastaba el poder que ya tenían y decidieron que los principios ilustrados de la igualdad y la fraternidad ya no les servían en el ámbito exterior.

El imperialismo norteamericano comenzó a principios del siglo XIX con la doctrina de Monroe (1824) y su lema era “América para los americanos”. Esta ideología sostenía como inaceptable la intervención europea en los asuntos latinoamericanos incluyendo una amenaza encubierta a aquellos que violaran este designio, de forma militar si fuese necesario. Es a partir de este momento en que EE.UU. se perfiló como una potencia en vías de desarrollo, aspirante al dominio de un vasto continente del cual podía sacar provecho económico a través del intercambio de mercancías (capitalismo). EE.UU. ofrecía productos manufacturados (textiles, calzado, materiales de imprenta, entre otros objetos industriales), y América ofrecía las materias primas.

Ciertamente, fue un comerciante llamado Diego Portales uno de los primeros americanos en darse cuenta del peligro que significaba este estrecho vinculo con EE.UU., pues con tan poderosa armada podían fácilmente reducir a los pueblos americanos a una situación de servidumbre, lo que efectivamente ocurrió así.

Las intervenciones militares de EE.UU. en distintas partes de América fueron motivadas por el afán de mantener sus privilegios económicos, obteniendo materias primas a muy convenientes precios y vendiéndoles manufacturas a precios mayores.

En este contexto se produjo el adueñamiento de la Cuba española en 1898 por parte de los yanquis, que incluso antes ya tenían un 90% de los capitales invertidos en ella.

En 1901 comienza la lucha por la independencia de Panamá

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