RECONSTRUCCIÓN NACIONAL

RECONSTRUCCIÓN NACIONAL- EL TRATADO GRACE Y LA SITUACIÓN NACIONAL ACTUAL.

La historia sirve para saber que hicimos mal y que hicimos bien. Es aprender del pasado para construir un mejor futuro, evitando errores y repitiendo las buenas acciones. La utilizamos como referencia y como una especie de manual para tomar decisiones. Después de todo, quien no conoce la historia está condenado a repetirla.

El contrato Grace fue tomado por la necesidad que pasaba el país en esa etapa de la historia, no teníamos como pagar la deuda externa, los ingresos nacionales eran menos de la mitad de la deuda. Estábamos en quiebra, pero el contrato Grace se presento como una salvación temporal a nuestros problemas económicos y también para recuperar la confianza del resto del mundo. Este tratado, sin embargo también nos quitaba lo que algunos decían soberanía nacional, ya que parte de nuestro territorio, los edificios públicos y nuestros recursos pasarían a mano de inversionistas extranjeros.

Entonces venia la interrogante ¿A quién le pertenece el Perú, a los peruanos o a los inversionistas ingleses?

Hoy en día el Perú la mayor parte de inversión es extranjera. Las grandes tiendas por departamento como “Saga Falabella” o “Ripley” no son nacionales, al igual que muchos supermercados y productos que usamos diariamente. Estas compañías prácticamente tienen monopolizado varios sectores productivos del país, ya que la poca competencia nacional que tiene es fácilmente superada por el desinterés mucha gente le da a los productos nacionales. El Perú tiene los recursos pero no los trabaja, nos falta industrializarnos. Pero no podemos cerrar estas empresas extranjeras, ellas son las que hacen que tengamos mayores ingresos económicos.

Entonces nos volvemos a preguntar ¿Quiénes son los dueños del Perú?

En la época de la reconstrucción nacional vivimos una situación muy parecida, donde la inversión extranjera superaba a la nacional y la clase alta apoyaba por completo a estos extranjeros al igual que hoy en día.

La historia se vuelve a repetir y surgen los mismos conflictos que en años anteriores, las personas a favor de estas inversiones extranjeras y las que están en contra de ella y quisieran que estas compañías cerraran y que solo trabajen compañías nacionales.

Dos bandos enfrentados, defendiendo lo que creen mejor y lo que más le conviene, pero ¿Cuál de ellos tiene la razón?, ¿Cuál de las ideologías tenemos que adoptar para ser un mejor país con una economía mejor a la actual?

Pero todo en extremo es malo. Ningún país puede vivir sin la inversión extrajera, ningún país es autosuficiente como para abastecerse a sí mismo y no necesitar el comercio, pero tampoco podemos depender completamente de la inversión extranjera, pues si esta cae nosotros caemos

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