Abolicion De La Esclavitud
Enviado por MPAPHRRG • 23 de Septiembre de 2014 • 1.027 Palabras (5 Páginas) • 598 Visitas
Abolición de la esclavitud en el Perú
y su continuidad
Humberto Rodríguez Pastor
hrodríguez@concytec.gob.pe
CONCYTEC-UNMSM
RESUMEN
Este ensayo examina la política gubernamental de Ramón Castilla frente al
problema de la esclavitud negra y china a mediados del siglo XIX. Manumisión,
Indemnización, hacendados y contratos, en tiempos de pleno auge del negocio
del guano, son analizados para precisar el verdadero significado de la ley de
libertad de los esclavos en 1854.
PALABRAS CLAVE: Esclavitud, Ramón Castilla, Lima, chinos, migración, Perú.
ABSTRACT
This essay examines Castilla’s government politic to deal the problem of black
and Chinese slavery in the middle of the XIX century. Manumission, compensation,
landholders and hire are analyzed during the peak of guano business to specify
the true meaning of the law of freedom of slaves in 1854.
KEY WORDS: Slavery, Ramón Castilla, Lima, Chinese people, migration, Peru.
AÑO IX N° 15, pp. 441-456 [UNMSM / IIHS, Lima, 2005]
442 INVESTIGACIONES SOCIALES
1. La esclavitud en Perú en 1854
Durante el año 1854 la situación del régimen de esclavitud en la sociedad peruana,
principalmente presente en la costa, continuaba de manera normal sin
que se previera cambios profundos e inmediatos. Durante todo el Virreinato,
parte de lo «normal» fue el tráfico de seres humanos, preferente, aunque no
exclusivamente, originarios de África1. En este período histórico era corriente
comprar, vender, permutar, maltratar esclavos, así como usar mujeres esclavas
como amas de leche. Y así fue hasta fines del año 1854 cuando se inició el
proceso de manumisión.
Eran habituales anuncios o noticias periodísticos como el ejemplo que sigue:
en un aviso de un diario de Lima una persona –no consigna su nombre– anuncia
que vende un matrimonio de esclavos que tiene una niña de seis años2. De esta
manera el ofrecimiento llevaba su yapa, ya que quien adquiriera a los cónyuges y
a su hija lograba a su vez la continuidad del provecho personal con el servicio de
un humano cautivo.
También era corriente la respuesta que los mismos esclavos daban a la esclavitud:
rebeliones locales, fugas frecuentes, creación de palenques de cimarrones3,
bandolerismo y delincuencia. Todo esto era una señal más del caos reinante
y del rechazo al orden integral existente; el Estado ni controlaba ni satisfacía a
todos los sectores sociales.
El régimen esclavista a mediados del siglo XIX no era el mismo que en otros
momentos, ahora albergaba una serie de transformaciones «subterráneas» que
deterioraban su integridad. Lo dicho puede comprobarse si se tiene en cuenta el
rechazo desembozado o silencioso pero permanente de los propios esclavos; los
cambios del Estado peruano ante la esclavitud4; la presencia en ciertos sectores
de la sociedad de corrientes de pensamiento liberales en contra del régimen
1 Debe tenerse en cuenta que a comienzos de la Conquista y en el Virreinato llegaron no sólo esclavos
negros africanos; del África se trajo esclavas blancas moriscas que fueron muy determinantes en
crear costumbres limeñas que aún perduran o desaparecieron (la tapada, balcones, algo de nuestra
gastronomía); de Asia se trajo a nuestras costas lo que se denominaba indios de China (aprovechando
el galeón de Manila), también indios de Filipinas. En esos mismos años de presencia europea se
«importó» esclavos nativos nicaragüenses. Posteriormente, en el siglo XIX (años 1862 y 63), se
forzó, raptó y fueron traídos en goletas a Perú centenares de polinesios
...