CUENTO SOBRE LA GLOBALIZACION

Recuerdo esa mañana antes de ir a estudiar, que mientras me lavaba los dientes mama veía las noticias, mi padre ya se había ido y mis dos hermanitos esperaban ansiosamente la llegada de Tulia, si se preguntan quien es era la trabajadora por días que ayudaba a mama. Se acercaban las siete de la mañana y el bus esperaba por mí, pero una noticia impactante en la televisión me detuvo, mas de 7000 trabajadores de una empresa colombiana se quedaban sin empleo, por culpa de una multinacional que se apoderaba de esta red empresarial, en aquel momento me sentí un poco triste, porque pensé en todas las familias de estos trabajadores que tal vez no tenían el equilibrio económico adecuado y sin duda se verían muy afectados. El bus pitaba y debí salir corriendo, ¡Adiós mama! –le grite a ella, sin tener tiempo de escuchar lo que ella respondió.

Ya en la escuela el ambiente se tornaba un poco pesado, nuevamente Carlos como acostumbraba hacerlo, saca de su bolsillo su nuevo celular, -“maldita tecnología, me decía siempre papa, acaso los padres de estos niños no se dan cuenta de la calidad de tiempo que les están quitando?”, siempre me impresiono el desmesurado crecimiento de las ventas tecnológicas, porque hasta donde tenía entendido debíamos sacarle un uso provechoso, pero contrario a esto lo único que todos hacían era alejarse de la realidad y entretenerse mientras muchos otros sufrían. Mi colegio era una institución gubernamental, por lo tanto nos encontrábamos alumnos de todas las clases sociales, entre esas estaba juanita solo me basto con mirarle sus ojos para entender que había estado llorando, me acerque y le pregunte –“oye juanita que te pasa?”, y estallando en llanto me respondió “esta mañana me entere que mi padre se quedo sin trabajo”, y yo le respondí –“pero juanita eso no son penas ya verás como todo se soluciona, al fin y al cabo somos solo niños”, Santiago es que tu no entiendes mi hermanita tiene cáncer”, pero para eso están las EPS’s “Santiago, por favor, sigues sin entender”- y yo le dije insistentemente “no, no estoy entonces entendiendo nada”- y juanita nuevamente dijo “Las EPS’s? a caso no estás actualizado? Esas entidades disque que ayudan a la gente, lo único que han hecho es desmejorar su servicio en casi toda su totalidad, lo que único que hacen es ponernos a hacer vueltas, y nunca solucionan nada, en fin, no creo que te interese nada de esto”- y así entonces termino Juanita la discusión y se fue. Con esto y otras cosas mas termino mi día. Siempre acostumbraba devolverme en bus, pero esta vez decidí hacerlo caminando, y mientras tanto lo único que hacía era pensar que ya no solo estaban mal las 7000 familia de la mañana, sino, 7001, porque ya le sumaba la familia de juanita, eso hizo que me preguntara que estaba ocasionando todo eso, y si de algo estaba seguro era que no solo le estaba pasando a ellos, sino, a mí y a muchas otras personas más. Y así fue, cuando llegue a casa mi mama sollozada en llanto hizo que por fin conociera el mundo, diciéndome que en la lista de la empresa que se había ocasionado el recorte de personal estaba el nombre de mi padre. Lo único que recuerdo es que sentí como si una aplanadora me pasara por encima, acaso era justo que por culpa de invasiones extranjeras y malas administraciones financieras por parte del gobierno colombiano nos viéramos con tan amarga situación.

Pasaron días, semanas, quizá meses la verdad no lo recuerdo bien, pero lo único que se es que mis padres debieron tomar una decisión, que me marcaria a mí y a mis

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