Secretaría de Educación Pública[pic 1][pic 2]
Universidad Pedagógica Nacional
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Unidad 212 Teziutlán, Puebla.
La escuela infantil entre la cultura de la infancia y la ciencia pedagógica y didáctica.[pic 5][pic 6][pic 7]
Identidades infantiles.
Licenciatura en Intervención Educativa.
Asignatura:
Campo de la Educación Inicial.
Semestre y modalidad:
Tercer Semestre en Línea.
Asesor:
Mtra. Judith Salazar Murrieta.
Teziutlán, Pue; a 20 de julio de 2016.
Identidad. | Características. |
Primera identidad.
Niño adulto o infancia negada. | - Se encuentra en la edad media.
- Después del destete el niño es el compañero natural del adulto.
- A los siete años recibe el carnet jurídico de adulto.
- Debe trabajar para obtener sus alimentos.
- Desaparece el sentimiento de infancia.
- Podía ser reprimido y juzgado.
- No tienen tiempo para vivir su niñez.
- Eran obligados a madurar según modelos a seguir de los adultos.
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Segunda identidad.
Niño hijo-alumno o infancia institucionalizada. | - Se origina con la revolución industrial.
- Es un proceso de redefinición social y cultural.
- Tras el surgimiento de la familia moderna la infancia se torna sumamente importante dentro del interés educativo de los adultos.
- Se considera que los niños son el reflejo de sus familias.
- La familia poco a poco asume una conciencia pedagógica.
- Despierta la moral para preparar a los niños ante la vida.
- La escuela dirige a los niños a las relaciones culturales y su comportamiento.
- El niño existe dentro de un mundo de relaciones de poder y pertenencia.
- La familia educa de manera afectiva, ética y para su comportamiento.
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Tercera identidad.
Niño sujeto social o infancia reencontrada. | - Trata de enriquecer los distintos ámbitos de la vida del niño.
- El niño tiene libertad, pero a su vez autodeterminación, dado que sus acciones deben enriquecerlo y desarrollarlo.
- Es legitimado como una figura social con derechos.
- El niño es incorporado y participa en todos los ámbitos de su vida.
- Logra visualizar la satisfacción de ciertas necesidades dadas por la sociedad de consumo.
- Despierta la conciencia en torno a sus relaciones interpersonales.
- El niño se empeña en ampliar sus propios horizontes.
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