Comunicación En La Prehistoria.

En la prehistoria, el hombre trataba de liberarse de las limitaciones de la comunicación oral. El intento de liberación de esas limitaciones puede obedecer a la ausencia de destinatario del mensaje, a que éste debe tener cierta permanencia o a que precise ser recordado en el tiempo futuro, y conseguirlo era importante para el hombre primitivo, que llevaba una vida nómada y que debía enviar a otros hombres, y recibir de ellos, mensajes para poder ser localizado y para reconocer los peligros que le acechaban, las posibilidades de casa, etc.

Las dificultades de la comunicación en los primeros tiempos cuando la cantidad de significados asignados a la información emitida y recibida era muy limitada, debió de haber sido tan difícil, tensionante y complicada para los primeros homínidos como sigue siéndolo para un niño de 2 años, que trata de comunicarse sin poder hacerlo y sin entender mucho lo que pasa a su alrededor. Sin embargo, las presiones del medio ambiente actuó ayudada por la selección natural –los que mejor se adaptaron acrecentaron sus posibilidades de supervivencia superando a los demás—hicieron que los primeros humanos mejoraran su comunicación al igual que su cooperación (sin que haya una antes que la otra), trayendo como consecuencia el crecimiento de sus capacidades de razonamiento lo mismo que su emocionalidad, que es el otro par de características de operaron al unísono.

Los primeros homínidos iniciaron la vida en grupo, adoptaron una vida colaborativa (unos cuidaban el hogar, unos cazaban, otros se encargaban del bienestar, etc.), para cooperar mutuamente desarrollaron formas de comunicación entendibles entre todos. Para que esa comunicación fuera efectiva debieron darles significados a los sonidos que emitían con la garganta y a los movimientos que hacían con el cuerpo, de esa forma nacieron las primeras “palabras”.

Luego en el paleolítico aparecieron la mayoría de las pinturas rupestres y los grandes monumentos. Se piensa que muchas de las pinturas rupestres están destinadas a expresar sentimientos religiosos y mágicos: si se pinta un mamut, se esperaba que la pintura reflejara el espíritu del animal y permitiría cazarlos con facilidad.

En esos tiempos la comunicación no solo se refería a las formas habladas, sino que, existían otras formas como tipos de arreglos corporales o adornos especiales en las armas e instrumentos, se dice que tiene que haber tenido significado especiales que implicaron mensajes hacia otros grupos o dentro de mismo clan, como por ejemplo la persona que sostenía un palo hecho con madera o llevaba ciertos adornos o pinturas corporales representaba la figura con mayor poder.

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