EL D'ZULIK'AK'
Enviado por ivancito34 • 4 de Agosto de 2015 • Documentos de Investigación • 362 Palabras (2 Páginas) • 281 Visitas
EL D’ZULIK’AK’
(Caballero en llamas)
A ESCASOS DIEZ KILOMETROS de Calkiní, en el poblado de Nunkiní, se lleva a cabo un fenómeno socio-cultural, cuya historia data de más de medio siglo; en el que un cuerpo hecho de ropas y todo lo flamable, simula que un hombre es quemado a la vista de todo público.
Hace más de cincuenta años, Nunkiní, municipio de Calkiní fue víctima de ciertas epidemias; que semanalmente cobraban por lo menos díez vidas, la más conocida y la más mortal de esas epidemias, es la llamada comúnmente viruela negra, enfermedad parecida a la viruela común solo que más peligrosa, por eso las personas que padecían esta enfermedad eran desterradas y llevadas hasta Sihó que en aquel tiempo era un rancho que servía de albergue para los enfermos; los colocaban en grandes hojas de una planta denominada por ellos HAAS (plátano); según ellos las propiedades curativas del plátano ayudaban a eliminar los embates producidos por la epidemia y quienes sobreviviesen según ellos, podían regresar no sin antes estar sin rasgos de viruela negra.
Aunque no lo parezca esta supuesta solución no dio resultado pues día a día miles de infantes morían a causa de la contagiosa enfermedad; fue entonces cuando un sacerdote, preguntó, ¿Cómo fue introducida la enfermedad al poblado?; y al hacer averiguaciones descubrieron que era, un fuereño que trataba de reponerse de la enfermedad con remedios viejos y cotidianos, y al saberlo el pueblo entero decidió que la suerte, al igual que la vida del fuereño terminarían primero en carbón y después en cenizas y se lo comentaron al sacerdote y el acepto la propuesta del pueblo, y es así como las personas contagiadas sometieron al individuo, en la plaza principal aun en contra de su voluntad, en una llamarada de fuego, que en poco tiempo terminó con el cuerpo y la vida del ser humano.
Esto no fue más que una superstición que dio resultado pues ellos pensaron que al incendiar al fuereño despejarían por siempre la enfermedad y así fue.
Es así como cada 13 de noviembre, llueva, truene o relampaguee este fenómeno se lleva a cabo con el fin de despejar toda la enfermedad.
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