EL DESTINO MANIFIESTO Y SU INFLUENCIA EN MÉXICO

EL DESTINO MANIFIESTO Y SU INFLUENCIA EN MÉXICO.

En Diciembre de 1823, el entonces residente de Estados Unidos, James Monroe postuló un ideal que se conocerá por su nombre: la “Doctrina Monroe”, en la cual se sintetiza: “América para los americanos”.

Esta doctrina fue reforzada por el “Destino Manifiesto”, idea expuesta por John O´Sullivan en 1845; mencionada doctrina legitima el derecho de los Estados Unidos para extender sus dominios, para dar cauce a los afanes imperialistas que ello implica, todo como un designio divino.

A principios del siglo XIX y con el auge de la industria algodonera, que reclamaba mas tierras y mano de obra esclava, se germinó un paulatino proceso de colonización y conquista furtiva de Texas, misma que se llevó a cabo con el apoyo de los Estados Unidos, dando así cumplimiento al mandato de la Divina Providencia, de llevar la paz, prosperidad y la democracia a los demás pueblos del mundo.

En 1935, mientras México tenía de presidente a Antonio López de Santa Anna, los colonos texanos proclamaron la Independencia de la “República de Texas”, lo que inició acciones bélicas por parte de ambos países.

Después de varias batallas, con victorias y derrotas para ambos bandos, los texanos tomaron prisionero al presidente mexicano, logrando con ello, la separación de Texas.

En 1845 se anexó libremente Texas a los Estados Unidos, pero la ambición por territorios mexicanos por los estadounidenses no terminó con esta parte de territorio.

En 1846 el imperio naciente declaró la guerra a México, quien llevó sus tropas hasta ocupar la capital de México, donde izaron la bandera de las barras y estrellas en el Palacio Nacional, por 8 meses. Así, en Febrero de1848, se firmaron los Tratados de Guadalupe-Hidalgo, que nos obligaba aceptar la pérdida de California, Arizona, Texas y Nuevo México, a cambio de 15 millones de dólares. Estos hechos se convirtieron en la sombra de la amenaza imperialista del coloso del Norte, no solo para México, sino para el mundo.

A tal grado se extendió la mística del Destino Manifiesto, que no bastó la conquista de estos territorios y los de la porción Oeste de los Estados Unidos, sino que el Destino Manifiesto traspasó otras fronteras y dio lugar a la compra de Alaska al Imperio Ruso, la anexión.de Hawai; la liberación de Cuba, Puerto Rico, Filipinas; y Guam de España.

Dejando de lado la Primera y Segunda Guerra Mundial, la Guerra de Corea, el conflicto de Vietnam y otras intervenciones militares, llegamos a una época más actual, específicamente al corolario Bush, que contiene la doctrina de la guerra preventiva, que justifica la intervención en Irak, ya que basa en ella, la estrategia de la guerra contra el terrorismo, sin destinatario específico, y sin necesidad expresa de una previa agresión determinada y sin la consiguiente declaración formal que exige el Derecho Internacional

Después

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