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ENSAYO SOBRE EL ARTE, LAS CUEVAS Y LA FILOSOFIA DE LAS CAVERNICOLAS


Enviado por   •  17 de Noviembre de 2012  •  1.438 Palabras (6 Páginas)  •  1.208 Visitas

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ENSAYO SOBRE EL ARTE, LAS CUEVAS Y LA FILOSOFIA DE LAS CAVERNICOLAS

El arte rupestre es una manifestación artística que el hombre ha dejado plasmada en cuevas, piedras y paredes rocosas, las cuales son representaciones de animales, plantas u objetos, estas obras que son consideradas entre las más antiguas representaciones del reflejo de la capacidad intelectual del hombre.

Los grupos humanos dedicados a la cacería y la recolección, usaban diferentes tipos de como la sangre de los mismos animales, carbón vegetal, heces corporales, arcilla entre otros. Para lograr el acabado de estas representaciones utilizaban los dedos, ramas, palos o untaban directamente sobre la roca.

Su denominación como “arte” no significa que sean objetos artísticos en términos que hoy los entendemos desde nuestra cultura occidental, para este arte seria más indicado el termino de manifestaciones rupestres, al momento de llamar esto “arte” le estamos dando un sentido que necesariamente no le dieron sus ejecutores.

El arte rupestre fue descubierto en el siglo XIX algunas cuevas, innumerables objetos “prehistóricos” hechos en piedras o huesos con formas talladas de animales. Este descubrimiento trajo consigo un gran avance en el estudio del pasado prehistórico, aunque estos hallazgos eran conocidos desde siglos atrás y en muchas otras partes del mundo.

Las primeras pinturas rupestres fueron descubiertas en el techo de una cueva en Altamira (Santander, España).

La cueva de Altamira es una cavidad natural en la roca en la cual conserva las obras artísticas más importantes de la prehistoria, fue descubierto por un cazador llamado Modesto Cubillas, la noticia de la cueva no tuvo ningún efecto entre los habitantes de la zona, conocido por poseer miles de grutas por lo que no causo ninguna novedad. Después de conocer la existencia de la cueva, el paleontólogo Marcelino Sanz de Sautuola visito la cueva entre 1875 y probablemente 1876. La primera vez en que visito la cueva la recorrió y solo hallo rayas negras repetidas, alas que no les dio importancia.

Cuatro años después en 1879, volvió a la cueva pero esta vez acompañado de su hija María Faustina Sáenz, de alrededor ocho años. Este “mero aficionado “de la paleontología en su segunda visita tenía el interés de buscar en la entrada de la cueva restos de huesos, como los que había visto en la exposición universal en parís en 1878.Maria mientras su padre estaba en la entrada de la cueva, la niña entro a una sala lateral allí vio unas pinturas en el techo de la cueva y corrió a decirle a su padre.

Sautuola quedo sorprendido al contemplar el maravilloso conjunto de pinturas de aquellos extraños animales que comían casi totalidad de la bóveda.

Las pinturas de Altamira fueron el primer conjunto pictórico prehistórico de gran extensión conocido en el momento. La novedad del descubrimiento era tan sorprendente que provoco desconfianza por parte de los estudiosos, los cuales llegaron a sugerir que el propio Sautuola los había pintado entre las dos visitas que había hecho en la cueva, negando asi su origen paleolítico.

En el congreso internacional de antropología y arqueología celebrado en Lisboa en 1880 ni la ardiente defensa de Vilanova y ni el afán de Sautuola evitaron la descalificación de Altamira. Pero pese a la descalificación el distinguido humanista y político miguel Rodríguez publico en la revista la ilustración española y americana avalando la autenticidad de las pinturas y resaltando su inmenso valor.

Sautuola y sus pocos seguidores lucharon contra esa sentencia. La muerte de Sautuola en 1888 y la de Vilanova en 1893 sumidos en el descrédito por su defensa, parecían condenar definitivamente las pinturas de Altamira a ser un fraude moderno.

Sin embargo estos hallazgos se hicieron frecuentes en numerosas cuevas europeas, por lo que su valor fue avalado. En Francia se descubrieron pinturas rupestres, restos de animales desaparecidos de la fauna peninsular como el mamut, reno y el bisonte.

En la cueva de Lascaux se descubrió en Francia en el año 1940uno de los más asombrosos testimonios consistentes en una especie de capilla sixtana pintada dentro de la misma, era tal calidad que se llego a pensar que se trataba de un fraude.

Esta caverna contiene magnificas pinturas prehistóricas cuyos autores fueron miembros de la sociedad magdaleniense, la misma

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