El Imperio Austro Hungaro

El Imperio Austro-Húngaro a inicios del siglo XX

Carlos Freile Granizo

A principios del siglo XX, Europa estaba pasando por unos momentos bastante difíciles, era una época de obscuridad, donde uno no se sentía a salvo siendo un extranjero o una persona que piensa diferente. Esto se puede ampliar cuando hablamos del nacionalismo agresivo y un claro proceso de germanización. El nacionalismo agresivo es sin duda una bomba de tiempo cuando uno se refiere a una guerra por estallar. Este nacionalismo es el que no permite que en un país entre culturas diferentes o de pensamiento diferente. Por otro lado, se habla de un proceso de germanización, que se puede describir como el principio del reinado del partido fascista. Nos adentramos mas en Europa y nos encontramos con Austria y Hungría, dos país juntos por un imperio, el Imperio Austro-Húngaro pero con influencias diferentes. Austria con una clara influencia de occidente, y Hungría con una fuerte influencia del oriente. Más adelante, vendría el reconocimiento de la multinacionalita, que ayudaría un poco a que se mantenga la paz por un tiempo más largo. El imperio tenía algunas diferencias con Europa, pero una de las más importantes que puede ser una diferencia o similitud, puede ser el sufragio debido al poder económico del hombre. En el Imperio había un 5% de represión, mientras que en Inglaterra, la sepa de la libertad había un 8%. Durante los finales del siglo XIX, el Imperio entra en un claro auge económico y poblacional, con la inclusión del libre mercado a la economía. Durante todo este tiempo, el Imperio Austro-Húngaro entra en un proceso de industrialización, que ayudaría para diferentes rubros de la economía. En 1872, Budapest es la capital de Hungría y como un subjetivo efecto se triplica la población, hay un crecimiento en la economía y es considerado un centro de libertad. Con toda esta ola de progreso, también hay un boom cultural en todas las artes como la literatura, filosofía, arte y la música. Ahora entramos a la primera Guerra mundial con el asesinato del Archiduque Francisco Fernando en Sarajevo. Con esto las potencias Europeas como Francia e Inglaterra aprovechan para desmembrar al Imperio. Como resultados de esta guerra esta: la fundación de nuevos países, variedad de nacionalidades y aceptación de las mismas, el Imperio ahora ya disuelto tiene la responsabilidad de la guerra. Finalmente, el mundo está de nuevo en paz, pero chispas de lo que fue la derogación de el Imperio están todavía por desmantelarse, porque todavía hay un gran poder sin hacer su movida, La Iglesia.

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