Expropiacion Petrolera

Los hechos:

La noche de un viernes 18 de Marzo de 1938, el aquel entonces presidente de Mexico, el General Lazaro Cardenaz del Rio, dio un mensaje a la nación anunciando formalmente la; total he irrevocable apropiación legal del petróleo en suelo mexicano. Explotado en ese momento por 17 compañias extranjeras, dando inicio a la llamada “Expropiacion petrolera”.

Con este suceso se da inicio a una serie de eventos de vital importancia en la historia de nuestra nación, sucesos que marcarían un periodo de apoyo, adversidades y sufrimiento hacia el pueblo mexicano.

El trasfondo:

Es totalmente razonable, el reconocer que la llamada “liberación del imperialismo extranjero”, fue un avance significativo en la economía e historia de nuestra nación, pero es en rara ocasión, en la que se explica y cuenta un poco del trasfondo histórico de dicha liberación, ya que no se nos mencionan los sucesos que llevaron al gobierno de aquel entonces a expropiar de forma abrupta y desorganizada el petróleo nacional.

Es por eso que en este ensayo hago mención de la serie de eventos que precedieron a la “expropiación petrolera”.

El apoyo al campo y la expropiación petrolera:

Durante los años treinta, el campo mexicano se encontraba en gran medida abandonado y con una terrible falta de apoyo económico para poder sembrar y cosechar los productos agrícolas determinados.

Fue tal la crisis que durante un periodo de la misma fue necesario importar productos de primera instancia de otros países, por ejemplo tuvimos que importar maíz de estados unidos, frijol y legumbres de Sudamérica y carnes varias para variar del vecino del norte.

Es por eso que durante el sexenio cardenista, se emprendio una ardua campaña de reactivación del campo mexicano, mediante una serie de reformas y creación de leyes agrarias y por supuesto grandes inyecciones de capital al campo.

Todo esto acompañado de propaganda, discursos presidenciales y claro los nunca faltantes acarreados que dijeran ante radio y periódicos principalmente “Dios bendiga al tata Cárdinas por ayudarnos con las tierras”.

Pero como la mayoría de los programas de apoyo, el impulso agrario se vio tendido al fracaso a los cuantos meses de haber iniciado, dejando al gobierno al borde de la total bancarrota. Es en ese punto donde el señor presidente intenta aumentar impuestos, acabar con hacendados y los sorprendentemente aún existentes casicados, lo cual causa una fuga de capital extranjero.

Tras estos sucesos el gobierno tenía dos opciones;

Por un lado podía endeudarse más con bancos extranjeros, e intentar seguir perdiendo el tiempo en el campo u otras acciones políticas o podía intentar hacer uso de un recurso del cual se sabía habia amplias cantidades en el territorio nacional y cuya explotación y venta estaban en pleno auge y desarrollo, así es tenían que hacer

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