GUERRA DE SIRIA - ENSAYO

PROGRAMA TÁCTICO 2019 – II

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Debemos tener en cuenta que, en la guerra de Siria no hay “buenos y malos”, en la guerra de Siria se están enfrentando las dos mayores potencias del mundo, EEUU y Rusia y ambos bandos han matado a civiles y lo siguen haciendo hasta la fecha, entonces, no hay “buenos y malos”, hay asesinos, dicho esto en seguida pensamos en los siguientes cuestionamientos ¿Porque Siria?, ¿Qué tiene Siria de especial?

Por otro lado, debemos tener en cuenta que, desde el fin de la guerra fría el mundo vive dividido en dos grandes bloques, el bloque occidental, liderado por EEUU y el bloque ex soviético, liderado por Rusia, cada uno de ellos tiene su propia alianza militar, creada para defender sus intereses con el uso de la fuerza, la alianza militar de occidente es la OTAN (Organización Del Tratado Del Atlántico Norte) y la equivalente de Rusia es la OTSC (Organización Del Tratado De Seguridad Colectiva), estos son dos grandes bloques contrapuestos con sus aliados, sus intereses y sus amenazas.

En el 2011, estallaron en Siria protestas en las calles, en sintonía con la llamada “Primavera árabe” la ola de reivindicaciones y protestas que fueron extendiéndose por todo el mundo árabe, pidiendo más democracia y más derechos sociales, el detonante fue Mohamed Bouazizi^[1], estas protestas tenían suficientes razones para hacer ceder a un régimen autoritario de un solo partido, en el que una familia, la familia al-Asad, ostentaba el poder por más de 40 años, donde no había elecciones, la libertad de expresión, las reuniones y asociaciones políticas no existían, donde los activistas y críticos con el gobierno eran encarcelados y torturados y donde se discriminaba minorías étnicas, entre otras violaciones de los derechos humanos y así sigue siendo a día de hoy, por lo tanto habían razones de sobra para que los sirios protestarán y pidieran más libertades y más democracia.

Las manifestaciones empezaron en marzo de 2011 y el régimen de al-Asad la reprimió duramente, hubo cientos de muertos civiles y otros tantos del ejército, uno de los puntos clave de esta guerra fue la deserción de los miles de soldados del ejército oficial de al-Asad, fue cuando EEUU decidió influir, armando a uno de los bandos de los soldados desertores, según revelaciones del New York Times y el Washington Post, desde 2012 la CIA estuvo suministrando armas, dinero y entrenamiento militar a estos rebeldes sirios, el programa llevaba el nombre de Timber Sycamore y tenía como objetivo presionar para que al-Asad diera un paso al lado. En este programa participaron también el Reino Unido, Qatar y Arabia Saudí

Es así como de unos grupos de manifestantes y soldados desertores nace de la noche a la mañana todo ejército con armas, organización y entrenamiento militar: habían nacido los llamados “rebeldes”, estos crecieron muy rápido en los primeros años de la guerra de Siria y llegaron a ocupar bastante territorio. Esta maniobra de financiamiento de Estados Unidos y sus aliados fue acompañada, obviamente del correspondiente blanqueamiento de los “rebeldes” en la mayoría de los medios occidentales, que fueron pintados como una especie de heroicos luchadores para la libertad, cuando en realidad se mezclaron rápidamente con grupos yihadistas y en muchas ciudades (como Alepo) llegaron a luchar codo con codo.  

Entre los años 2013-2014 los rebeldes como tales prácticamente no existían, se habían fragmentado y mezclado con varios grupos de tendencia yihadista, de los cuales ya eran prácticamente indistinguibles. Sin embargo, el flujo de ayuda estadounidense no se detuvo y de hecho el mismo New York Times dijo que, muchas de las armas suministradas por estados unidos y sus aliados terminaron en manos de yihadistas.

Es así como, la ayuda armamentística que proporcionó EEUU y sus amigos fue clave para que Siria acabara siendo el país devastado que es hoy. Sin el financiamiento y armas estadounidenses las protestas, probablemente, se habrían apagado tras algunas decenas de muertos y detenidos y un puñado de reformas estéticas de poca forma como pasó, por ejemplo, con la primavera árabe de Arabia Saudí que sí, aunque nadie lo diga también la tuvo y acabó exactamente así: represión brutal y mínimas reformas, y a nadie se le ocurrió entrometerse y claro que al-Asad era y es un miserable dictador pero cuesta bastante de creer que EEUU apoyará los “rebeldes” por amor a la democracia y a los derechos humanos, sobre todo viendo la larga lista de países amigos de los EEUU que, son tan dictatoriales como Siria o más y que pisotean a su pueblo y a los DDHH, Arabia Saudí es el clásico número uno, pero también está Qatar, Emiratos Árabes, Birmania, Uganda, Guinea Ecuatorial, Egipto, Azerbaiyán, Afganistán, Uzbekistán y bastantes más

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