Guerra cilvil en España

Guerra civil en España

“La última batalla de la guerra civil española dejo más 10000 muertos con una duración de 3 meses la cual se desarrolló en el rio Ebro…”

La ofensiva de Aragón a la derecha del río sangre, al norte de Noruega pallaresa y al sur del Ebro.

Río Ebro, España.

25 de Julio de 1938

hasta esta fecha ya había transcurrido un año desde el inicio de la Guerra Civil Española, el ejército de la II Republica tenía una situación sumamente comprometida. El desastre de Teruel y la posterior ofensiva de los ejércitos de Franco dividieron en dos zonas la república en Vinaroz. Necesitaban una decisión rápida pues para ese entonces ya se consideraba la victoria de los republicanos. El jefe de Alto Estado Mayor, el presidente Negrín y el general Rojo decidieron tomar la iniciativa y enfrentarse con los nacionales por medio de una batalla en el río Ebro y es ahí cuando todo empieza.

La batalla del Ebro se desarrolló durante la guerra civil española en el verano del 25 de julio al 16 de noviembre de 1938, en el río Ebro, desde Tarragona a Zaragoza, (España). Se caracteriza por ser una de las batallas más numerosas, en ella se enfrentaron las tropas republicanas con 100000 hombres y mas de 200 aviones y el ejército de Franco con 98000 hombres y más de 300 aviones.

La razón principal de la batalla fue la oposición de las tropas republicanas hacia el ejército de Franco al querer imponer una dictadura militar que gobernara el país

A la madrugada del 25 de julio la primera avanzadilla de la 42 División republicana, atravesaba el rio Ebro, desde la orilla izquierda a la derecha. Las tropas de la 42 División republicana, consiguieron sus objetivos marcados, fundamentalmente eran cortar las comunicaciones con Mequinenza-Maella-Fayón, y atraer el mayor número de fuerzas enemigas contra ella, se batieron con gran valentía, pero una vez que lanzaron la contraofensiva nacional, la inmensa superioridad de fuerzas y material obligaron a la 42 División a volver a pasar el río, perdiendo más del 60% de sus soldados.

La batalla del Ebro había terminado con 4.500 muertos en el bando nacional y entre 10.000 y 15.000 en el republicano. Ambos ejércitos perdieron gran cantidad de aviones, pero mientras Franco reponía rápidamente sus pérdidas con la ayuda italiana y alemana, la República perdió entre 130 y 150 aparatos que ya no podía reponer. Al terminar la batalla la moral del Ejército nacional se había elevado nuevamente. Sus fuerzas estaban alcanzando un nivel de eficacia que la República no llegaba ni siquiera a acariciar. Por el lado republicano la afortunada evacuación del Ebro permitió disimular las pérdidas. Les quedaba el consuelo de que durante la batalla habían perdido en cuatro meses el terreno que habían conquistado por sorpresa en sólo dos días, el Ejército del Ebro había quedado totalmente

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