LOS MODELOS DE CRIANZA EN EL SIGLO XVIII.

En este presente ensayo hablaremos de “Los modelos de crianza en el siglo XVIII”, de las ideas que se tenían sobre el niño y la infancia en ese siglo, las características que tenían las relaciones que los padres establecían con los niños en esa época, al igual que los aspectos que sufrieron modificaciones en cuanto al cambio en las relaciones entre padres e hijos a través de ciertos factores que atribuyeron a dicha modificación, así como al interés por la educación de los niños, los cambios sociales, culturales, los avances de las ciencias, la creación de los espacios para las madres trabajadoras, para poder así reflexionar sobre la forma en que han evolucionado las concepciones sobre el niño y la educación y los factores que influyeron en estos cambios, a través de este ensayo podemos comparar la noción de infancia de aquel siglo con la de hoy, desde el momento de la concepción, el parto, los cuidados, la alimentación, la influencia de las nodrizas, entre otros aspectos mas.

A lo largo de los siglos, han existido diversos conceptos sobre la infancia, los cuales han orientado en gran medida los comportamientos y actitudes hacia los niños, el tipo de educación y las relaciones que establecían los padres hacia estos, pero estos conceptos han ido cambiando conforme al paso del tiempo gracias a las numerosas investigaciones.

La noción de infancia tiene un carácter histórico y cultural y es por ello que ha tenido diferentes apreciaciones en la historia, su concepción depende del contexto cultural de la época. Durante el siglo XV en la concepción de infancia se observa cómo “los niños son malos de nacimiento”, luego, en el siglo XV, el niño se concibe como algo indefenso y es por ello que se debe tener al cuidado de alguien y se define el niño “como propiedad”, para el siglo XVI ya la concepción de niño es de un ser humano pero inacabado “el niño como adulto pequeño”, en los siglos XVI y XVII se le reconoce con una condición innata de bondad e inocencia y se le reconoce al infante “como un ángel”, el niño como “bondad innata” y en el siglo XVIII se le da la categoría de infante pero con la condición de que aún le falta para ser alguien, es el infante “como ser primitivo”, a partir del siglo XX hasta la fecha, gracias a todos los movimientos a favor de la infancia y las investigaciones realizadas, se reconoce una nueva categoría: “el niño como sujeto social de derecho”.

En aquellos tiempos se observaba que el primer hijo aparece antes de los dos años después de la boda, después del primer nacimiento, los otros se presentaban cada dos años o menos, el numero de mortalidad entre el primero y el quinto años era muy alto, los padres y las madres de esa época eran insensibles, para los padres el juego social de la reproducción imponía algunas reglas, el cuidado que la madre proporcionaba era desde el nacimiento hasta los siete años de edad, el transmitir el nombre, incluso el patrimonio, ya que el heredero varón era una necesidad de supervivencia individual y colectiva, el niño, el primogénito, retomara, transmitirá la raza, la tierra, la granja, el negocio, etc., esta finalidad personal y social es la que se manifiesta en el machismo, en el circulo femenino de las familias se lleva a cabo el embarazo, donde la futura mamá es aconsejada por su madre, hermanas, las vecinas, las comadres, es un saber retransmitido de generación en generación que informa sobre las posibilidades de fecundación y de embarazo así como consejos alimenticios y preceptos de higiene.

Desde finales del siglo XVIII se propuso la lucha contra la interrupción del embarazo, se amenazaba con pena de muerte a los jóvenes y a las mujeres que hayan encubierto su embarazo y sus alumbramientos, las obligaban a declarar ante las autoridades civiles, la sociedad civil y la sociedad

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