La Franja Amarilla
Enviado por alsinningl • 17 de Octubre de 2013 • 562 Palabras (3 Páginas) • 282 Visitas
¿DÓNDE ESTÁ LA FRANJA AMARILLA?
Por William Ospina
Hace poco tiempo una querida amiga norteamericana me confesó su asombro por la
situación de Colombia. "No entiendo -me decía-, con el país que ustedes tienen, con el
talento de sus gentes, por qué se ve Colombia tan acorralada por la crisis social; por qué
vive una situación de violencia creciente tan dramática, por qué hay allí tanta injusticia,
tanta inequidad, tanta impunidad. ¿Cuál es la causa de todo eso?". Por un momento me
dispuse a intentar una respuesta, pero fueron tantas las cosas que se agolparon en mí que ni
siquiera supe cómo empezar. Sentí que aunque hablara sin interrupción la noche entera, no
lograría transmitirle del todo las explicaciones que continuamente me doy a mí mismo,
tratando de entender el complejo país al que pertenezco. Por otra parte, entendí que muchas
de mis explicaciones no le habrían gustado a mi amiga, o la habrían puesto en conflicto con
su propia versión de la realidad.
Es frecuente para nosotros oír de labios generosos la deploración de esas desdichas y el
asombro ante nuestra incapacidad para resolverlas. El primer asunto es, pues, preguntarse si
de verdad la sociedad colombiana vive una situación excepcionalmente trágica, si es tan
distinta esta realidad de la del resto de los países, o al menos de los países del llamado
tercer mundo. Mi respuesta es que sí. Colombia es hoy el país con mayor índice de
criminalidad en el planeta, y la inseguridad va convirtiendo sus calles en tierra de nadie.
Tiene a la mitad de su población en condiciones de extrema pobreza, y presenta al mismo
tiempo en su clase dirigente unos niveles de opulencia difíciles de exagerar. Muestra uno de
los cuadros de ineficiencia estatal más inquietantes del continente, al lado de buenos índices
de crecimiento económico. Muestra fuertes niveles impositivos y altísimos niveles de
corrupción en la administración. Muestra unas condiciones asombrosas de impunidad y de
parálisis de la justicia y al mismo tiempo una elevada inversión en seguridad, así como
altísimos costos para la ciudadanía en el mantenimiento del aparato militar. Muestra las
más deplorables condiciones de desamparo para casi todos los ciudadanos, y sin embargo
es un país donde no se escuchan quejas, donde prácticamente no existen la protesta y la
movilización ciudadana: una suerte de dilatado desastre en cine mudo.
Esto último es pasmoso. La visible pasividad de la sociedad colombiana alarma a los
visitantes. En las recientes huelgas que conmocionaron a Francia pudo verse cómo una
sociedad que vive relativamente bien en términos económicos y protegida por un Estado
responsable, sabe reaccionar en bloque ante
...