La Historia Del Sol

El nacimiento del Sol y de los planetas que giran a su alrededor tuvo lugar hace 4.600 millones de años. En el interior de uno de los brazos de la Vía Láctea flotaba una nebulosa, una nube entre las muchas que poblaban la galaxia. Pero en esta nebulosa ocurrió un fenómeno: de forma apenas perceptible, una región de la nube comenzó a contraerse y, en menos de 12.000 millones de años, en el corazón de esa nube, una bola de gas caliente, a una enorme presión, inició la reacción nuclear. El Sol acababa de nacer.

No todas las estrellas tienen las mismas características, el Sol es una estrella de tamaño medio: las estrellas supermasivas pueden tener cien veces la masa del Sol y las más pequeñas tienen un 8% de la masa solar.

Las estrellas como el Sol permanecen en fase de protoestrella por algunos millones de años. En esta fase la temperatura no es todavía lo suficientemente alta para que se inicie la reacción nuclear.

Tras esa primera fase, el Sol alcanzó la secuencia principal, el tiempo estable en que una estrella quema, el combustible nuclear. Los cálculos indican que en el Sol esta fase comenzó hace 4,5 mil millones de años y durará otros 5 mil millones.

En ese estado permanecerá hasta que se le agote el combustible y se produzca un cambio brusco en su sistema de generación de energía. El Sol entrará en la fase de gigante roja, durante la cual su radio aumentará hasta la órbita de Marte y perderá mucha masa.

Esta expansión del Sol durará millones de años hasta que finalmente, la producción de energía de esta gigante roja se agotará y la estrella se colapsará formando una enana blanca, que tendrá la tres cuartas partes de la masa original del Sol y un tamañao similar al de la Tierra, con sus átomos aplastados por la gravedad.

Llegará un momento que la enana blanca expulsará material, formando una burbuja de años luz de diámetro que se denomina nebulosa planetaria. Es el último resuello de la estrella.

Nebulosa planetaria del “Anillo”

El final del Sol vendrá cuando deje de radiar energía, convirtiéndose en una enana negra del tamaño de la Tierra. Esta fase todavía es desconocida en el universo ya que no es lo suficientemente viejo para que haya ningún ejemplo.

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