La Invasión Napolionica

LA INVASIÓN NAPOLEÓNICA.- El emperador de Francia, Napoleón Bonaparte, en su afán de dominar Europa y el Mundo, tuvo que librar larga y penosa lucha contra Inglaterra, a la sazón primera potencia del Orbe e impecable enemiga suya, como también de la Revolución Francesa.

Con el fin de derrotar, pues, a los ingleses el Emperador había conseguido la adhesión de varios estados de Europa, incluso España era su aliada; no así Portugal que había demostrado más bien preferencia por Inglaterra. Ello determino Napoleón la ocupara militarmente pasando por territorio español.

A comienzos de 1808 un ejército de 100,000 soldados franceses al mando del Mariscal Murat, ocupo las principales plazas de España, aparentemente sin propósito de agresión, aunque el verdadero objetivo era, pues, apoderarse de la Nación Hispana.

Los escándalos de una corte y la presencia de tropas extranjeras en el país, agudizaron el descontento y la reacción del pueblo español, dando, así, origen al motín de ARANJUEZ (17 de marzo de 1808), motín que obligo a abdicar a Carlos IV en favor de su hijo Fernando, siendo expulsado, asimismo, el ministro Godoy. Pero poco después Napoleón, que maquinaba en secreto, consiguió, en la entrevista de Bayona, que ambos contrincantes, padre e hijo, renunciaran la corona de España a favor suyo, después de lo cual entrego dicha corona a su hermano José, quien fue proclamado Rey de España e Indias con el nombre de José I.

Los españoles, al conocer tales acontecimientos, se levantaron como un solo hombre contra los usurpadores en defensa de su libertad e independencia. El exaltado patriotismo hispano unido a su tradicional valor, como a su singular modo de combatir (guerra de guerrillas), mas la ayuda que brindándoles Inglaterra, cuyos efectivos c hallándose con mandados por el Duque de Welligton, convirtieron a esta guerra de independencia a una lucha sin cuartel en el esfuerzo extraordinario y titánico de un pueblo contra los invasores. Toda España se transformo así en todo un campo de batalla, batalla que constituyo uno de los reveses más grandes de su carrera militar.

La guerra de la independencia duro de 1808 a 1814 los españoles lucharon con singular valor y heroísmo y alcanzando brillantes victorias como las de Bailen y Cintra (1808). El triunfo definitivo se logro con la batalla de Victoria (1813), después Napoleón entrego la corona a España a Fernando VII.

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