La Revolucion

La Revolución

"El inicio del siglo XX se caracteriza por la inestabilidad política causada por la Revolución. En Querétaro se sucedieron revueltas en Jalpan y Cadereyta y se realizaron manifestaciones en la capital. El gobernador González de Cosío renunció el 10 de marzo de 1911"(21). Durante el gobierno de Joaquín F. Chicarro, se dio lugar al autoritarismo, abusos y crueldad, ya que éste impuso préstamos y se llevó por la fuerza a campesinos de la región para alistarlos en el ejército huertista. "Con Federico Montes como gobernador, se iniciaron las transformaciones en Querétaro al introducir el control oficial del comercio, la venta de productos básicos a bajo precio; instalar el consejo de salubridad para combatir las epidemias y la escasez de aguas y promulgar la ley de protección a peones. El 2 de febrero de 1916, Venustiano Carranza decretó a la ciudad de Querétaro como capital de la República; fue la sede del Congreso Constituyente para redactar la nueva Constitución Nacional que se promulgó el 5 de febrero de 1917 en el Teatro Iturbide, posteriormente nombrado de la República. En este mismo año se promulgó la nueva Constitución de Querétaro".(22)

“El 5 de febrero y la consumación de la Revolución Mexicana. Prensa y legislación durante la lucha armada”

En nuestro país el comienzo del siglo XX estuvo enmarcado por una larga lucha armada (1910-1924) que dejó aproximadamente un millón de muertos.

La Revolución Mexicana inició en 1910, cuando el presidente Porfirio Díaz se reeligió por sexta vez, luego de gobernar al país por más de treinta años, sólo que esta vez Francisco I. Madero, con el apoyo de miles de mexicanos y de otros líderes revolucionarios, inició la lucha armada para arrebatarle a Porfirio Díaz lo que se resistía a dejar, la presidencia de la República. Los principales dirigentes de la Revolución fueron: Francisco I. Madero, Emiliano Zapata, Francisco Villa, Pascual Orozco, Álvaro Obregón y Venustiano Carranza. Cada uno de ellos desde su trinchera luchó por derrocar a Porfirio Díaz y lo consiguieron después de seis meses, en mayo de 1911.

Pero la Revolución no terminó ahí, pues al asumir la presidencia Madero, el 6 de noviembre de 1911, los otros grupos continuaron la lucha al oponerse a las decisiones del nuevo presidente.

En febrero de 1913 Madero fue asesinado por Victoriano Huerta, quien tomó la presidencia de la República. Sin embargo, Huerta tampoco gozó de las simpatías de los otros sectores revolucionarios y estos continuaron la lucha ahora para derrocarlo a él.

En 1917 Venustiano Carranza, ya en su carácter de presidente convocó al Congreso Constituyente compuesto por miembros que pertenecían a todos los grupos revolucionarios para que redactaran la Constitución de 1917; documento que garantizaría el cumplimiento de los anhelos de todos los revolucionarios y de todos

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