Ley De Herodes

La ley de Herodes

Al hablar del Totalitarismo y Autoritarismo nos ubicamos en épocas antiguas, pensando en que son cosas del pasado, pero no nos ponemos a pensar en que aún en nuestros tiempos son cosas que aún siguen pasando a pesar de las rebeliones que han existido como la Independencia o la Revolución, los gobiernos siguen manejando a su antojo al pueblo, quizá no igual pero si relacionamos lo que pasa en ésta película con alguna de las teorías clásicas yo la relacionaría con la aristocracia según Aristóteles, donde el poder es sólo de pocos, pues aunque en nuestro país hay democracia el poder aun así sigue siendo de unos pocos, pues son pocos los que manejan al pueblo, y lo manejan a su conveniencia, a mi manera de ver hubiera sido mejor quedar en una monarquía, pues así el poder, aunque es sólo de una familia, solo era de ellos y no sería tanta la ambición que tienen de robar o sacar el mayor provecho en los seis años que tienen de poder cada presidente, porque en cada legislatura es la misma historia y deudas tras deudas, en las que los únicos beneficiados son las personas con poder y los perjudicados sigue siendo toda la ciudadanía.

La película comienza en los años de cuando Miguel Alemán era el presidente (1949) y en el pueblo San Pedro de los Aguaros el alcalde trataba de huir con todo el dinero que era del pueblo, pero los habitantes lo persiguieron queriendo detenerlo y de un machetazo le cortaron la cabeza. Al suceder esto, el gobernador se entera y le ordena a su secretario que de inmediato nombre a alguien para que sea el nuevo presidente y así sus planes no se vengan abajo. El secretario López llamó a Ramírez para que le de a conocer expedientes de afiliados al partido (PRI), entonces le muestra tres, de los cuales eligen al más dejado, Juan Vargas, quien era el encargado del Basurero y un miembro antiguo del partido.

Ramírez va a buscarlo y le informa que el secretario del gobernador quiere verlo. El secretario López le comunica que él será el nuevo presidente municipal de San Pedro de los Saguaros.

Vargas entusiasmado llega al pueblo junto con su esposa, y quedas asombrados pues no era lo que ellos esperaban, era un pueblo fuera de la civilización.

Vargas quiere comenzar a hacer para llevar la modernidad al pueblo, pero su secretario le informa que no hay más que 7 pesos. Entonces da un recorrido por el pueblo y se entera de que hay una cantina y un burdel. La dueña del burdel (Doña Lupe) quiere darle dinero para que le permita seguir con su negocio pero Vargas no lo acepta porque él quiere hacer todas las cosas bien. Pero después de da cuenta de que no puede hacer nada con la cantidad de dinero que hay, así que decide ir nuevamente con el secretario López, y su esposa le recomienda que le lleve un regalo, así que él le lleva un cerdo. En el camino, su carro se le descompone y se le detiene a medio camino, pero se encuentra con un gringo llamado Mr. Robert, el cual le ayuda a arreglar su carro, pero le miente diciendo que es algo muy complicado y costoso, siendo que era solo cuestión de unos cables, así que Vargas le dice que no tiene dinero para pagarle, pero que vaya a su pueblo y cuando él regrese de con su jefe le va a pagar lo que le debe. Cuando llega con su jefe, el jefe le rechaza el cerdo, entonces Vargas le dice que necesita presupuesto, pero López le dice que ni crea que le va a dar algo de dinero, porque todo se tiene que ir a lo de las elecciones, y lo único que le dio fue la constitución y una pistola, y le dijo que la usara a su conveniencia siempre aplicando la ley de Herodes “o te chingas o te jodes”.

Cuando Vargas llegó a su pueblo, se pone a estudiar la constitución y recuerda lo que su jefe le dijo, así que vuelve a ir con doña Lupe y Vargas al ver que por cada multa ella le da más y más dinero, su ambición crece y lo acepta, entonces hace lo mismo con cada persona y utiliza la constitución y la modifica a su conveniencia.

Al anochecer, llegó Mr. Robert a su casa a cobrarle, pero como Vargas tenía dinero le dice que pase a su casa y pase ahí la noche. Al día siguiente van caminando Mr. Robert y Vargas por el pueblo, y de las pláticas que tenían llegan a un acuerdo en el que Mr. Robert recibiría

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