Los Hominidos

La evolución del ser humano empezó con la aparición de los primates hace unos 65 millones de años. A través de múltiples excavaciones y descubrimientos los expertos en este campo han podido clasificar todas las especies pertenecientes a la misma familia. Por esta razón los monos y simios guardan similitud con el ser humano. Dentro de esa clasificación se encuentran el Ardipecus, Australopithecus, Homo Habilis, Homo Erectus, Homo Neandertalis y el Homo Sapiens Cromagnon. Uno de los primeros homínidos que surgen en África hace más de 6 millones de años A.C. son los Ardipecus, es un género fósil de primates homínidos a los que se considera posibles descendientes de Orrorin tugenensis y ancestros de los australopitecinos. Las similitudes con los Australopithecus son grandes, aunque los fósiles encontrados presentan rasgos más simiescos y menos corpulencia que éstos. El segundo homínido fue el Australopithecus con la existencia de 4-3.8 millones de años A.C. y proveniente de África. Median más de un metro de estatura con un cerebro similar al del gorila, una mandíbula grande con el mentón hundido, caminaban erguidos y podían correr. El tercero en la lista es el Homo Habilis que vivió hace 2.5 millones de años en África y se dispersó gradualmente por Europa y Asia. Su altura alcanzaba el metro y 55 cm, era robusto, ágil y caminaba erguido; sabia usar el fuego pero no producirlo y se protegía en cuevas. Vivía de recolectar semillas, raíces, frutos y ocasionalmente comía carne. El cuarto fue el Homo Erectus, vivió entre 1.8 millones de años y 300.000 años antes del presente proveniente de África. El gran descubrimiento del Homo Erectus fue el fuego. El gran avance fue, más exactamente, la domesticación del fuego, ya que éste existía en su forma natural (incendios, volcanes, etc.). Se sirvió de él para calentarse, asar alimentos, lo convirtió en el "hogar": centro de la vida social y elemento integrado en el entorno humano. Con el fuego aparecen los primeros campamentos organizados, al aire libre o en cuevas. Este es el origen del verdadero cambio psicológico de la humanidad y del desarrollo de estructuras sociales. A través de este evoluciona el El Hombre de Neandertal (Homo neanderthalensis) es una especie del género Homo que habito Europa y partes de Asia occidental desde hace 230.000 hasta 29.000 años atrás. Por su desarrollo cerebral, su género de vida y su capacidad inventiva, está más próximo del homo sapiens. Era hombre bajo pero fuerte, de piernas cortas, de potentes mandíbulas, cerebro grande, bien adaptado a climas extremadamente fríos, hábil en la confección de sus ropas de pieles de animales, habitó las grutas, cuevas y abrigos. Debió de existir entre ellos una forma de enseñanza y esto exige un lenguaje.

Practicó un culto a los muertos, lo que puede asimilarse a un sentimiento religioso o una idea de que todo no acaba con la muerte. Es

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