Mini Historia

siempre trate de ser la niña perfecta que todos querían que fuera, educada, bien vestida complacía a todos solo por verles una sonrisa en la cara, y evitar que mi abuela me pegara.

Desde pequeña me acostumbraron a callar todo lo que me pasara, aguante muchas cosas malas de parte de mi familia, ellos me decían que era para que yo no fuera mal criada, pero empeoraron las cosas.

A la edad de 12 años comencé el high school y comencé a ver la vida como realmente lo era, una porquería.

Cuando en realidad no aguante todos los insultos de mi familia decidí escaparme, pero mi intento de libertad fue en falso, no pude hacer nada; Solo me aguante mis golpes por lo que hice. Después de varios meses lo volví a hacer, y lo logre: pude escaparme de ese infierno. ¿Debía ir a casa de mi madre o casa de mis amigas? “PARA NINGUN LADO” pensé en voz alta, así que me fui camino a la playa, para tratar de distraer un poco mi mente. Estuve en la playa 2 semanas. Tenia lo necesario dinero y ropa por que la comida la compraba con el dinero y cargaba la tarjeta de mi abuela, me impresiono que no la fueran bloqueado; pero me acorde que por medio de esa tarjeta me pueden rastrear, así que salí de esa playa lo mas rápido que pude al banco mas cerca, saque todo el dinero que había y bote la tarjeta. Tome un carro directamente para otra parte de mi país, muy lejos de hay no quería que nadie me encontrara.

Fui a casa de mi tía, al este del país, ella no tenia mucho contacto con mi familia eso era lo mejor en este momento. Estuve allí 2 meses y me decidí a buscar trabajo aunque no soy mayor de edad me dieron empleo, en un supermercado de cajera. Llevaba trabajando 1 mes cuando el jefe se comenzó a comportar muy extraño, quería pasarse de la raya como quien dice, yo no quería nada con ese señor nunca me a gustado eso, soy muy conservadora.

Bueno hay estaba yo con mi jefe sobre mi tratando de abusar de mi y yo no hallaba con que defenderme, pero alli me acorde de algo; llevaba en mi bolsillo una navaja, no quería hacerlo pero lo hice, lo apuñale con todas las fuerzas que tuve justo en su parte intima.

Su sangre recorría mis manos y mis piernas, me sentía... ¿Tranquila? ¿Relajada? No sentía ningún cargo en mi cuerpo, sentía que mi conciencia Solo me decia “Solo lo hiciste por defensa propia, no es nada malo” yo le respondi “Pero.. ¿Ahora que hago?”

Y ella como si fuera una persona de carne y hueso me dijo, “Llama a la policia, para que vean que tu misma te entregaste”. Eso fue lo que hice llame a la policia, bueno a 911 y lo que dije fue “Acabo de matar a mi jefe, vengan por el cuerpo y por mi”...

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