¿PORFIRIATO O GOBIERNO DE PEÑA NIETO?

EL AYER Y EL HOY

Mazami Lisseth Antonio Tapia

Lic. Lengua y Literatura Hispanoamericanas

Vivimos en un país bello, turístico, cultural, y con una de las mejores gastronomías del mundo, un país que tiene fama, tanto buena como mala, un país que a pesar de ser rico en biodiversidad  es pobre en ingresos económicos, un país quien tiene personas inteligentes y trabajadoras, pero con pocas posibilidades de obtener un buen empleo, vivimos en un país que la educación “gratuita” y de “calidad” tienen una cuota establecida y leyes educativas, cuales no tienen beneficios alguno para la sociedad estudiantil y académica, vivimos en el país donde la educación puede aparentar ser el principal interés, pero que en realidad no se le da el apoyo necesario para que esto sea real.

        Años atrás, desde la invasión de los españoles en nuestras tierras, nuestros antepasados fueron educados e instruidos, aprendieron variedades de cosas, tanto religiosas, laborales y culturales, lamentablemente no todos tuvieron la misma suerte, no todos podían ir a las escuelas, no todos tenían le interés dogmático para ingresar a estas, pero tenían el interés de aprender, y aquellos que lo lograban obtenían buena educación escolar y profesional a corta edad. Aprendían idiomas, que tal vez hoy en día consideramos como lenguas muertas, ya que los únicos que usaban el latín, eran quienes practicaban el dogma católico.

        En la dictadura de Díaz se hicieron grandes esfuerzos por extender la educación pública, lo que hizo posible que más niños recibieran educación primaria,  cada vez hubieron más personas que pudieron seguir estudios superiores y así se empezó a formar en todo el país una clase media de profesionales y empleados públicos. En 1891 fue promulgada la Ley Reglamentaria de Educación, que estableció la educación como laica, gratuita y obligatoria. Asimismo fueron instituidos los llamados Comités de Vigilancia. Para que los padres y tutores cumplieran con la obligación constitucional de mandar a sus hijos a la escuela, esto fue un gran avance para la educación en México, ya que dejábamos por completo atrás la ignorancia y las pocas posibilidades de tener una vida estable en ese tiempo.

         Mi pregunta es, a pesar de todo los cambios que hemos tenido desde esos tiempos hasta los nuestros, ¿hemos progresado o retrocedido en la educación en nuestro país? Porque muchos de los grandes pensadores, filósofos, escritores, entre muchas otros profesionistas terminaban su licenciatura a corta edad, tomando en cuenta que a la edad en la que finiquitaban sus estudios, los jóvenes de ahora apenas están concluyendo el nivel preparatoria. A pesar de esto, el interés de los jóvenes en aquellos tiempos para aprender era más importante que el que se tiene en la actualidad. En nuestros tiempos, la posibilidad de poder terminar el nivel primeria es complicada, pero llegar al nivel universitario es una odisea, ya que no hay recursos económicos para que todos logren llegar y finiquitar sus niveles académicos.

        Podemos decir que este periodo fue un cambio total en varios aspectos, principalmente la educación que comienza a dejar a lado el clero y la influencia que poseía en ella la iglesia. Estos aspectos ayudaron a impulsar al país y dar comienzo del México actual, pero que lamentablemente los gobiernos después de este no supieron dirigir, y tuvieron desvíos, haciendo a un lado la educación.

        La historia de nuestro país aparenta ser la misma en cada gobierno, solo con diferentes personajes y un antagonismo por parte de este, El Porfiriato y el Gobierno que tenemos actualmente, tiene ciertas características que hacen que sean semejantes, entre ellas el mal gobierno, el declive de la educación, las manifestaciones y acciones de los estudiantes, la insatisfacción por parte de estos,   la dictadura oculta de Peña Nieto. Entre ambos mandatos podemos hacer comparaciones, pero en lo personal, considero (anulando el tiempo en el que estuvo en el poder Díaz), el Porfiriato fue mejor como dictadura que el gobierno del presidente actual, ya que este señor, mejor conocido como Peña Nieto ha perjudicado a la nación en menos de 3 años y lamentablemente seguirá vigente hasta el año 2018, y si nuestro des fortunio sigue, el presidente en turno podría seguir con la dictadura que Peña ha dejado al país.  

        Un siglo ha pasado desde que Díaz dejo el poder, y no hay avances significativos en ningún ámbito social, y con esto no quiero decir que ningún presidente no haya hecho algún cambio, porque si lo hicieron, pero no fueron lo suficientes progresivos para que México dejara de tener una calidad inferior en la educación, ¿qué necesita México para dejar de estar estancado? ¿Por qué a pesar de los cambios que se han hecho no se ha logrado tener un equilibrio en nuestros recursos? Los cambios que se han hecho no se ven beneficios completos para la sociedad; el mal manejo de nuestro gobierno nos da fortaleza y motivación para luchar por nuestra nación, es una razón fuerte para que los estudiantes cambiemos las reglas del juego, y fuerzas para enfrentar a quienes nos impiden un cambio positivo.

        La decadencia Porfirista junto al gobierno de Peña Nieto es notoria, ya que esta ha provocado el letargo en la vida social, política y cultural de México y esto atribuye que la población mexicana cambie, abra los ojos y enfrente el problema que le rodee, los estudiantes se vuelven el engranaje principal, la base de la sociedad. La dictadura de Díaz llega a su fin con la revolución, suceso que fue fruto del cambio de mentalidad de las personas, pero sin que este fuera motivado por acontecimientos ajenos al país, sino fue suceso que nació por sí solo, y gracias a la revolución, los ámbitos sociales, educativos, culturales y artísticos fueron alterados, pero a pesar de que todos fueron trastocados, el más afectado fue el ámbito educativo.

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