Panorama General Del Siglo XVII Y XIX

Panorama general del pensamiento educativo europeo de los siglos XVIII y XIX.

En esta época los ideales de la instrucción eran: universalidad, gratuidad, estatismo, laicismo y renovación cultural. La educación ya no era exclusiva de la iglesia católica o de los jesuitas que tanto auge tuvieron, se pretendía que la escuela fuera pública y encaminada a los quehaceres cotidianos de las personas sin importar su clase social.

La educación pasa de ser política a ser social y con ello pretende que la mayoría de los individuos tengan acceso a ella ya que se estaba dando un proceso de transformación del trabajo humano y se renovaban los instrumentos y procesos productivos, así que, los obreros tenían que responder de acuerdo a las necesidades de la moderna producción de la fábrica, en ese, sentido, creo que se convenció a los patrones a educar por necesidad, ya que un error operativo en alguna de las nuevas maquinarias e instrumentos no era deseable.

El socialismo estaba en el poder, esto significaba que podía ser un buen intermediario entre la pedagogía y que sería capaz de intervenir en la construcción de una escuela nueva (activa y progresista) cabe destacar que John Dewey tenía una característica muy igual con el socialismo esta idea era la fuerte acentuación entre la vida social y la vida escolar. Y verdaderamente es una relación necesaria ya que toda educación debe procurar la socialización del individuo, ya que la base de ella misma es una institución social.

John Dewey sintetizaba la instrucción del viejo mundo así: “la escuela como monasterio” con la enseñanza de las “tres erres” (leer, escribir y hacer cuentas, sin embargo ahora se pretendía dar la instrucción a aquellos que antes no habían tenido posibilidades, aunque esto cambio y se creó un sistema educativo vinculado a las experiencias y actividades diarias de las personas, llamado con desprecio por los conservadores “instrucción de taller”.

Dewey tenía la pedagogía (learning by doing) el aprender haciendo, que trata principalmente de la vinculación que debe tener la escuela a la vida real.

• Problemas a los que se enfrentaron los Estados modernos para hacer posible la creación de la escuela pública y la formación de maestros.

La educación provenía de la práctica del culto y del gobierno, desde ese momento resultó una unión entre educación y religión y ese era el principal obstáculo a vencer por la Reforma.

En cada estado era necesario un ministerio de gran autoridad para la educación y la instrucción, así, se mostraba cada vez más las ideas y condiciones para un paso definitivo de las iglesias a los estados.

En Alemania ya se proclamaba que la escuela debía ser no sólo de clérigos sino también de magistrados, asumiendo con ello las exigencias de los reformados. En Francia hacían referencia a que no correspondía a los pedantes, pretender el honor de educar a los ciudadanos.

Mario Alghiero expone como el Estado interviene en la educación; sobre las problemáticas con otras instituciones tradicionales, que controlaban la instrucción. Otro problema enfrentado es acerca de la legitimidad que se abroga el estado para asegurar la educación igualitaria para todos los ciudadanos, ofreciendo las mismas oportunidades para todos.

Ignaz Felbiger, Federico II, María Teresa elaboraron un proyecto general de reforma de la instrucción que fue aprobado en 1774. Algunos puntos de la nueva reforma son los siguientes:

- Escuela popular donde asistieron los niños de 6 a 12 años.

- Escuela principal destinada a la formación profesional entre ellas las escuelas normales.

- Escuela intermedia se preparaban para las universidades.

Dentro de esta Reforma de Instrucción, se encontraba la preocupación de la creación de las escuelas normales para la formación de profesionales de la educación; se aborda también sobre el análisis de la evaluación de la escuela pública desde sus orígenes hasta nuestros días.

Un dato relevante es que la educación primaria era gratuita para los pobres y también obligatoria.

• Repercusiones mundiales de la Revolución Francesa, y particularmente en México para la conformación de un Sistema Nacional de Enseñanza y de Escuelas Normales.

La impresión de biblias a gran escala y la doctrina determinó que enseñar a leer se convirtiera en un imperativo moral.

La primera repercusión que considero se desprende de la Revolución Francesa es la rápida proliferación de las escuelas, proporcionando no sólo los medios sino también una razón secular para la expansión del alfabetismo.

En Francia, la idea de un sistema escolar surgió primero en parte como una oposición a los jesuitas, quienes se encontraban entre los principales educadores de élites., sin embargo, con la proliferación del estado-nación es claramente uno de los principales factores que motivó el crecimiento del sistema escolar internacional. Cada nación que siguió el ejemplo de algunas grandes ciudades se ha dado cuenta que la escuela habilita a los hombres para la participación en otras instituciones y en la vida diaria, actualmente quien no posee más que el conocimiento de la lectura y la escritura, se denomina un analfabeta funcional, esto, porque no tiene conocimientos ni cercanía con los avances tecnológicos.

Cuando México logra su independencia aparecen dos propuestas de nación que son: una contenía elementos derivados de la época colonial y la otra consideraba a la nación como una identidad propia. El grupo liberal habla con claridad sobre las circunstancias nacionales y los esfuerzos por hacer realidad la educación.

En cuanto a la educación se dice que es una de las superestructuras de la sociedad, relacionándola con las características y problemas de un grupo o época. La educación está vinculada con la sociedad, la cual impone su propia orientación; dispone de capacidad para modelar la conducta del hombre.

Es necesario mencionar que el campo de la educación pública se considera como programas, como enseñanza primordial que ayudará a buscar objetos fundamentales al formar nuevas generaciones también como formar maestros ya que ellos son los encargados de hacer realidad la política educativa de cada país.

En 1833 con Valentín Gómez Farías al mando la educación sufrió constantes desajustes, parecía avanzar y organizarse pero también ofrecía

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