R Este Medio Mingo Lo Estuvo Pensando Pero A Un Rato Decidió Que No. Mingo Le Explicaba De Forma Dudosa Que Era Lo Que Tenía Que Hacer Y Porque No Podía Abandonar La Casa, A Monchito Le Parecía Raro Que Se Excusara Tan Extraño Y Que A La Hora De Habl

Tal y como mencionaron los expositores, el objetivo principal de la conferencia es “crear conciencia” a la importancia histórica y arquitectónica del comúnmente conocido como “Sanatorio Durán”.

Para entender la motivación que existe detrás de la necesidad de salvaguardar este lugar histórico. La conferencia inicia indicando que, en el sanatorio sucedieron experiencias únicas, que fueron vividas por aquellas personas que se vieron impactadas directa o indirectamente. Esto sin duda genero un cumulo de sentimientos particularmente especiales y duraderos. Otro factor que también genera motivación, es entender como se miraba el mundo en esa época y ver a través de los ojos de esas paredes que sin duda fueron testigos de muchas historias tanto de alegría como de tristeza. Por ultimo un factor que fue destacado en la conferencia es que, mientras estuvo funcionando el sanatorio conto con características de un hospital de primer mundo y uso estrategias de gestión novedosas y en vanguardia.

Costa Rica es un país pequeño, pero grande en Historia. Sin embargo resulta paradójico que no existan políticas claras, que sirvan para proteger su patrimonio. Esto se ve claramente ejemplificado en los casos mencionados en la conferencia, en repetidas ocasiones, edificaciones ya sea declaradas patrimonio o no son derribadas en términos de un día. Dejando en evidencia las carencias de leyes y reglamentos dedicados a la protección de estos lugares históricos.

El Sanatorio Duran, no ha sido la excepción, de esta destrucción. Afortunadamente no a sido derribada, como en otros casos, en los que se a dado prioridad a la urbanización por sobre el valor histórico de las edificaciones.

Aunque no ha sido derribado en su totalidad, si que a sido victima de deterioro, desmantelación y destrucción de algunos de los edificios.

El sanatorio además a contado con la mala suerte, de ser usado recurrentemente como escenario de historias fantasiosas, se relaciona ahora mas con el miedo y la muerte, cuando antes era un lugar para dar vida y esperanza.

Para una mentalidad “modernista”, creyente en la constante renovación de la tecnología y las edificaciones, es complicado entender el valor que tiene un lugar que fue testigo de cientos de historias. Historias a veces con final feliz y a veces no.

Además mencionaron los expositores, que para ellos el acto de conservar el Sanatorio, es una especie de homenaje a todos aquellos que pasaron o vivieron en ese lugar.

A lo largo de 55 años de servicio (1918-1973) existieron innumerables historias, una de ellas, fue la labor incansable de los médicos, que entregaban su vida en pro de la salud de sus pacientes.

Algo que dejaron claro, es como la vida de las personas que entraban por las puertas del sanatorio daban un giro de 180 grados, hay que tomar en cuenta, que hubieron personas que nunca volvieron a sus casas y pasaron sus últimos momentos de la vida en este lugar.

Dentro de esas puertas, existía una rutina cotidiana, que creaba un “mundo” dentro de otro. Una comunidad donde se compartían alegrías y tristezas, se compartía alimento. Tenían la costumbre incluso, de celebrar los cumpleaños de los pacientes, esto genero mucha unidad y dependencia, era como ser parte de una familia. Prueba de ello es que al morir uno de los pacientes, el personal del sanatorio acompañaba al cuerpo hasta la tumba.

A continuación los expositores, nos presentan una parte de la historia del Sanatorio.

Como antecedentes encontramos un acontecimiento importante en 1904, cuando el Dr. Luis Paulino Jiménez, escribe en La Gaceta un articulo sobre la necesidad de que exista un lugar para combatir la tuberculosis. El tratamiento adecuado de la tuberculosis, era casi inexistente en el siglo XX, tanto en Centroamérica como en Costa Rica. Ya que no se contaba con equipo, lugares ni personal para asistir a los pacientes.

Es en el año 1914, que el Dr. Durán junto con el Lic. Manuel Coto Fernández, inician con la idea de traer un sanatorio, inspirados en los existentes en Estados Unidos. Estos los conoció el Dr. Durán cuando una de sus hijas se enferma de tuberculosis y él la lleva a Estados Unidos, para que fuese tratada. El hecho de que una de sus hijas padeciese la enfermedad, también fue el principal motivante a la hora de crear el sanatorio.

el 16 de agosto de 1915, Don Alfredo González Flores, presidente en ese momento, aprobó la creación del Sanatorio Durán. Es así como inician la búsqueda del lugar donde seria construido. Es finalmente escogida una finca comprada por el Gobierno en Potrero Cerrado de Oreamuno, Cartago. Esto en parte a que la municipalidad de Cartago decide ayudar al doctor.

La construcción se inicia en 1915 y es culminada la parte inicial del proyecto en 1918, que es cuando abre sus puertas bajo el nombre de Sanatorio Carit, en homenaje al Doctor Adolfo Carit Eva. Los planos del sanatorio se inspiran en los sanatorios de Estados Unidos como el Loomis en Liberty, Nueva York. Aunque cada aspecto de su construcción fue dirigido y supervisado por el Dr. Durán.

Una parte

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