Resumen De La Obra El Capital De Carlos Marx

Partiendo de una concepción tripartita; concurren tres tipos de gobierno; sustentados cada uno bajo la indisoluble y autentica legalidad o cualidad de lo que es conforme al contenido de las leyes, bien sea espirituales, territoriales ó intelectuales. Poseemos en primer lugar un gobierno Espiritual o teocrático, donde encontramos un mundo creado por Dios y dirigido por él con apego a la fidelidad de su palabra, que como promesas firmes y veraces se cumplen inexorablemente en todos los seres humanos, y especialmente en aquellos que con sentido de pertenencia cobran ánimo para obrar en nombre de la justicia, de la fe y la confianza, apropiándose sustancial y manifiestamente de las bienaventuranzas celestiales. Legalidad y legitimidad son dos cosas distintas en los mencionados tipos de gobierno; en el Espiritual, la legalidad es el salón espacioso y formal que funge como tribunal divino donde puede llegar el resto de la humanidad, a solicitar derechos que le son propios y que de ser ejercidos desencadenan la libertad de obtener prerrogativas de ley, predeterminadas para los seres humanos, creados por Dios. Mientras que la legitimidad es la puerta por donde entran los hijos de Dios, a donde esta la providencia de su amor para cada vida que se determina a guardar y a respetar su palabra; también hay propósito; visto con detenimiento y en la complejidad de sus múltiples implicaciones, Legitimidad es el perfeccionamiento del pensamiento divino, inmanente a la historia de salvación de orden colectivo que se cierne sobre la humanidad, en donde prevalece la inefable gracia de su amor y la seguridad de conseguir un fallo definitivamente firme a nuestro favor. En segundo lugar tenemos un gobierno Político Territorial, estatuido por leyes propias en cada nación; donde en el transcurso de la historia de la humanidad, hemos visto que es improbable vivir sin leyes, siglos atrás, en Babilonia se inmortalizo el código de Hamurabi; Hoy, en los Estados modernos impera la democracia asentada en el principio de la legalidad; que opera conforme a la pirámide de leyes de cada Estado soberano, donde la constitución tiene rango supralegal y en donde los ciudadanos se conducen por este sistema de leyes para arreglar sus conflictos, respetando el juicio emanado de un ordenamiento jurídico; donde la legalidad esta al servicio de la población; proporcionando lugar al arreglo racional de las contradicciones; otrora signado por La Ley del Talión ("ojo por ojo, diente por diente") Legalidad y legitimidad son dos cosas distintas, Alguien puede cumplir la ley debidamente, actuando en la legalidad de sus normas, sin alcanzar la legitimidad que le asistiría al acatar con respeto su espíritu, cimentado en el consenso y la participación simétrica de todos sus ciudadanos y por ello podría ser legal, pero, sin embargo, no alcanzaría la legitimidad. El solo cumplimiento de la ley, equivale a la legalidad, mas no tiene la fuerza de la legitimidad, que le dispensa el hecho de ser justa, equitativa y aprobada por una mayoría determinante. Hay gobernantes que caminan en la legalidad de su nombramiento, pero que no alcanzan la legitimidad emanada de la aceptación y el respaldo de Dios en su actuar; así como en el ánimo de un marcado porcentaje de sus ciudadanos. Por ultimo tenemos el gobierno Personal, donde el hombre sin Dios procura dirigir y gobernar su individualidad, a través de su intelecto, ajustándose a una legislación de su propia inspiración, actuando en la legalidad, sin mas liderazgo que el suyo; en donde intenta ir en pos de valores consuetudinarios, que la mayoría de las veces resultan de carácter frágil; colocándolo continuamente en una encrucijada frente al futuro. Pero como legalidad y legitimidad son dos cosas distintas; En un gobierno de carácter personal; el propósito divino es lo que marca la legitimidad al patrocinar una visión de crecimiento, excelencia de beneficios y una sólida administración particular; generosa en todos sus aspectos que nos introduce al disfrute de un presente y un futuro promisorio; donde el pasado no cuenta. Algunos enfoques promotores de los elementos claves de esta visión de crecimiento incluyen: • Buscar vías que eleven el potencial humano para conseguir y asegurar apetecibles activos Y el Posicionamiento en Dios, para sostener el crecimiento y la multiplicación integral. • Se requiere una estrategia de equipo para formar y encauzar la vida, extrayendo de ella, el mayor grado de productividad administrada que satisfaga las necesidades propias, encontrándose entre ellas las laborales; las de la familia, las de la iglesia; en la medida que cada rol continúa en expansión. • Desarrollar de continuo, mejoras en nuestra calidad de vida y evolución personal permanente; organizando alternativas de cambio respaldadas por un plan sucedáneo. • Es absolutamente esencial para el futuro, poner énfasis en el desarrollo de proyectos visionarios que cuenten con el respaldo de programas coordinados, que incluyan mejoras operativas alineadas con el progreso en curso, mediante un sistemático y continuado proyecto de vida; es el capital humano quien nos llevará a encontrarnos en pie de igualdad; y es entonces cuando podremos alcanzar los objetivos fundamentales de crecimiento, excelencia y consolidación de una definida administración armónica. • El crecimiento integral, esta ocurriendo hoy como respuesta satisfactoria a las necesidades cambiantes de la sociedad optimista, Dios está actuando rápidamente sobre proyectos personales con enfoques amplios de fe, para desencadenar proyectos macros. • Espero haberles transmitido una visión por demás futurista, que brinde un rápido y amplio panorama de innovadoras iniciativas forjadoras de empresarios exitosos. • En conclusión, permítanme dejarlos con un par de mensajes positivos: - La cantidad de personas satisfechas con un nuevo estilo de vida, darán testimonio de avance, consolidación y crecimiento; y serán ellos quienes silenciosamente afianzaran los resultados positivos y significativos, palpables en dígitos. - Así como nuestra es la esperanza sobre el rumbo que hemos de seguir porque apunta a un periodo grandioso e inmediato en el desarrollo que le brindaremos a nuestro país. Partiendo

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