Revolución Francesa

ANTECEDENTES DE LA REVOLUCIO FRANCESA

AGOSTO DE 1789

Declaración de los derechos del hombre y el ciudadano

En un principio los hombres nacen iguales y libres, bajo ninguna circunstancia puede cata-logársele o etiquetársele, eso viene posteriormente sobre una utilidad común, toda aso-ciación política busca la conservación de los derechos naturales e imperceptibles del hombre estos derechos hacen referencia a la libertad, la propiedad, la seguridad y la resistencia a la opresión.

“El principio de toda soberanía reside esencialmente en la nación” nadie está autorizado para para dictar o ejecutar autoridad alguna ya que la libertad especifica no hacer daño al semejante es así como la ley únicamente puede únicamente prohibir cualquier acto que sea nocivo para la sociedad. Todo individuo tiene amplio derecho a hacer consultas con los respectivos representantes para saber así de su formación como sociedad, esto debe ser reciproco tanto para castigar como para recibir o proteger, recibir esta información no depende de la clase social que ocupe el individuo.

Ningún hombre debe ser acusado, detenido o preso más que en los casos que la ley te-niendo los argumentos de una forma prescrita, así mismo la ley debe aplicar castigos ya establecidos y necesarios al delito cometido en caso de que este exista, anteriormente no puede dictar una condena o castigo si el acusado no ha sido declarado culpable.

El individuo no debe ser atacado o expuesto por sus ideales, creencias o doctrinas depen-dientemente del tema al que hagan referencia ya que el derecho a expresarse y a la co-municación es uno de los hechos más preciados que se tienen como ciudadano, claro sin dañar a terceros.

Todo individuo tiene el total derecho de comprobar y aprobar el financiamiento de recur-sos públicos, se debe de tener el derecho y el acceso a pedir cuentas para así saber hacia dónde se dirigen ciertos fondos.

“Toda sociedad en que la garantía de los derechos no esté asegurada ni determinada la separación de poderes, no tiene constitución”.

La autoridad no debe privar o despojar a algún hombre de lo que es su propiedad, sin pre-via demanda que especifique razones evidentes y tras esto ser comprobado una justa in-demnización.

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