Y finalmente en la parte inferior central se muestra una cesta de frutas con naturalidad y tono casi muerto, su tonalidad es muy obscura.
Enviado por Amapola Yonfá • 20 de Noviembre de 2016 • Tarea • 1.199 Palabras (5 Páginas) • 309 Visitas
[pic 1]
“ Baco adelescente ”
Óleo sobre lienzo
98 X 84 cm
Se encuentra en la Galería de los Uffizi de Florencia, Italia.
Análisis pre-iconográfico:
Se observa madurez en los trazos dibujísticos, el dominio casi matemático del cuello y la cabeza con relación al torso, nos muestra una anatomía perfecta, se nota la tensión muscular al apoyar el codo sobre el colchón sucio, en la cabeza la dirección de los ojos, la nariz y la cara en tres cuartos, muestra una verdadera soltura en el dibujo, lo destacable de esta obra es la mirada y el escorzo de la mano, que sostiene una copa de vino tembloroso, brindándonos a nosotros el público con gesto de familiaridad y placer.
El color es dominado por los tonos claros de la piel y la sábana. La piel utiliza los colores rosa, Bermellón, los anaranjados, en el rostro se nota aún más esta diferencia de tonalidades claras, el rostro de Baco en su parte derecha lleva los tonos bermellón que le da la vitalidad con carácter sereno y altivo, en contraste con la parte izquierda, descansan los colores anaranjados, que le dan al rostro ese volumen de radiante belleza, lo destacable del rostro es el manejo magistral del espesor tridimensional, el tono y el color de los ojos logrados, que casi se podría contar las pestañas inferiores de esa mirada franca, rostro que culmina con un destello brillante de la punta de la nariz.
Y finalmente en la parte inferior central se muestra una cesta de frutas con naturalidad y tono casi muerto, su tonalidad es muy obscura.
Análisis iconográfico:
En una primera y abarcadora visión de la obra podemos advertir que la representación es netamente antropomórfica y que la imagen del dios es muy similar a los autorretratos del propio autor. Sigue la línea antigua que habían retomado los escultores vistos, en la cual la figura es mostrada en su juventud y está coronada con uvas y hojas, en tanto que una de sus manos sostiene la copa de vino. Sin embargo, el juego de claroscuros es típico de Caravaggio. La luz recae sobre el personaje y los objetos simbólicos que lo rodean, en tanto la sombra envuelve el fondo de la escena y resalta, de ese modo, la figura del joven. A diferencia de las representaciones escultóricas, sin embargo, el personaje es representado en una postura absolutamente informal. Está inclinado y el drapeado de su manto indica una línea de movimiento que dinamiza la imagen. Ambos datos: dinamismo y quietud no llegan, sin embargo, a marcar una tensión en la imagen sino que la misma se resuelve en la actitud de sueño y adormecimiento de los sentidos que el gesto y la mirada de Baco nos transmiten. El conjunto expone una doble significación simultánea de abundancia y decadencia. Al igual que lo que sucede con algunas obras de Rubens, el Bacco Adolescente muestra una clara apelación al espectador. Bacco invita a compartir el vino a quien se asome a la obra mediante la mirada. Los párpados algo caídos y las cejas arqueadas sugieren que se encuentra en pleno proceso de embriaguez. Es una mirada que connota placer, de color oscuro y profundo en intensidad como el de las uvas entremezcladas en sus cabellos. La posición del rostro es un semi perfil. Su inclinación va en dirección a la copa de vino, lo que parece ser consecuencia del movimiento general del cuerpo que, a causa del gesto invitante al levantar la bebida a modo de brindis, debe recaer sobre uno de los laterales de la imagen. Las grandes mejillas rosadas se unen en un relleno y curviforme mentón, lo cual, al sumar la curvatura de las cejas completa una idea general de redondez. Los labios, carnosos y rosados, aparecen cerrados y completan un gesto de burlona serenidad.
...