Aprendizaje acelerado parte 2

Capítulo cuatro

Este capítulo nos habla sobre el efecto pigmaleon que radica en nuestros propios pensamientos, es la forma en que se trata a los demás es la forma en que los demás responden. Se basa en el principio como si y en lo que creo que es, es lo que uno crea.

El doctor Robert Rosental desarrollo una teoría de cuatro factores:

Clima.- lo componen todos los mensajes no verbales de parte del líder. El clima puede comunicar expectativas negativas como positivas.

Retroalimentación.- de acuerdo con lo que el líder espera de empleado, responder en mayor o menor grado.

Cantidad de datos o información.- que proporciona el líder al subalterno

Rendimiento o falta de rendimiento.- lo logra un líder de su subalterno, ya que las expectativas pueden influenciar la conducta.

El doctor J. Sterling Merlinton cree que todo líder debe aprender a ser pigmaleon positivo, ya que su labor debe ser influenciar a su subordinado y lo debe hacer en forma positiva o negativa. El líder debe asegurar que su influencia se positiva para crear beneficios.

Capítulo cinco

Este capítulo nos recuerda los aspectos anatómicos del cerebro y como cada parte tiene una función muy importante para el aprendizaje.

Como es que la información que se recibe a través de los órganos se transporta hasta la corteza del cerebro en todas sus zonas de forma que la información es identificada, interpretada, analizada y en base  a eso se realiza una respuesta adecuada.

Como cuando el sistema detecta una situación que lleva una emoción que tenga prioridad el sistema límbico toma el control sobre el pensamiento cortical bloqueando las funciones racionales, evitando poder pensar, concentrarse o responder a ninguna otra cosa más que al estar alerta de esa situación.

Esa forma justifica la razón de que el corazón domina a la razón, si el sentimiento es suficientemente fuerte. Como cuando el maestro es agresivo al solicitar algo el alumno identifica eso como un riesgo y se bloquea, evitando poder dar una respuesta adecuada.

Nos habla de que la corteza cerebral recibe miles de impulsos de los sentidos, pero solo presta atención a limitada selección de estos, de manera que si la información que es expresada por los ponentes no es de interés o del agrado de los oyentes esta no será registrada por los órganos y no llegara a la corteza cerebral. Así se sabe que si la información expresada pueda llegar a la corteza cerebral de los oyentes debe ser interesante, importante, aplicable o acompañada de una emoción intensa.

Hay tres tipos de memoria: una fugaz, que solo dura instantes, una de trabajo, que mantiene los datos para realizar una labor y otra permanente, que permite recordar a largo plazo. Se sabe que el estado emocional afecta la manera de aprender las cosas, si el estado de ánimo es positivo y optimista se facilita la labor del cerebro, por el contrario, si es de angustia o pesimismo se entorpece.

El estrés también es otro factor que afecta el desarrollo de un buen trabajo, si se lleva hacia emociones positivas se puede convertir en un factor positivo, no es real la idea de que si se desahoga el enojo o estrés de forma agresiva se acaba con el estrés, por lo contrario el enojo provoca más enojo y se llega al momento de dar una respuesta agresiva a cualquier estimulo.

Para tener una buena inteligencia emocional, es necesario saber qué es lo que realmente se quiere, para poder fijarse metas y establecer decisiones que favorezcan la realización de esas metas. Es necesario poder controlar las emociones, es saludable tener tanto emociones positivas como negativas pero de manera balanceada.

La automotivación permite llegar a un estado de ánimo positivo, lo que facilita las asociaciones del pensamiento y genera más pensamientos positivos. Está comprobado que el optimismo y la risa favorece la memoria y el pensamiento.

...