Control de lectura

Control de lectura

La lectura nos dice que el contrato es una institución jurídica y que ha estado presente en todas las naciones contemporáneas, pero actualizándose conforme pasa el tiempo. Se han encontrado antecedentes de los contratos desde hace mucho, para ser más claros, desde la prehistoria humana. La evolución y progreso del contrato están apegados las etapas de la humanidad como en la edad antigua, media, moderna y contemporánea. El contrato puede tener un desarrollo o cambio en el futuro, esto debido a que la sociedad en nuestros tiempos tiene cambios muy rápidos y drásticos como lo son en la ciencia y la tecnología.

Prehistoria y Edad Antigua

En este gran periodo de existencia de la humanidad el ser humano logro sentar las bases para salir de la barbarie, se realizaron descubrimientos que le dieron la oportunidad de sobresalir y satisfacer algunas necesidades. Estas necesidades requerían de una suma de esfuerzos individuales para beneficio de muchos, esto era un acuerdo de voluntades para lograrlo. El principal acto mercantil en esta época de la historia humana lo fue el intercambio o trueque que viene del actual contrato de permuta que aun en nuestros tiempos se practica en algunas regiones del planeta. En los tiempos más remotos de la humanidad encontramos que el contrato antes de ser un acto jurídico fue un hecho social; ya después en la antigua Mesopotamia surgiría la escritura. Aunque las primeras civilizaciones no reglamentaron de una buena forma o manera los contratos, no los exime de que los conocieron, aplicaron y regularon y que fueron quienes pusieron las bases para que el contrato sea lo que es hoy en nuestros tiempos.

Roma

Por el hecho de que el derecho romano nos da demasiado entendimiento es difícil lograr un entendimiento para lograr abordar el estudio del contrato en esta época.

Para empezar el derecho romano ha sido una gran base para la gran variabilidad de ordenamientos jurídicos occidentales, y en materia de contratos hay un sinfín de material como múltiples principios que hoy en día son la base contemporánea de la teoría del contrato. El origen de la palabra contrato procede de roma, del latín contractus, pero también en roma el contrato tuvo una constante evolución; los romanos fueron posiblemente los primeros en darse cuentan que el contrato no es solo un acto que crea obligaciones, sino que también, establece una norma jurídica individualizada, esto quiere decir que los contratos son ley para quien los celebra.

Edad Media

En esta época el contrato se encontró en una regresión ha estadios más primitivos, esto se debió a que la humanidad se creaba en comunidades más reducidas que se encontraban alejadas de intercambios culturales, también por la invasión de grupos barbaros quienes conquistaron a los descendientes directos de los romanos, además de la corrupción que sufrieron las instituciones jurídicas de ese entonces que venían heredadas desde Roma y el intercambio cultural. En pocas palabras y como lo dice Néstor de Buen, esta época que es la Edad Media no aporto cosas novedosas importantes a la evolución del contrato debido a una serie de factores que no ayudaron mucho al desarrollo del contrato.

Edad Moderna

Durante la fase final de la Edad Media, en España la ciencia jurídica tuvo un gran realce tanto en el aspecto académico como en el legislativo. En esta época las otras naciones de Europa tuvieron un gran desarrollo jurídico ligado al contrato y a la teoría de las obligaciones aunque un poco menos destacado que en España.

España es quien alcanza el más alto nivel en el aspecto legislativo respecto del contrato, pero en Francia el desarrollo de la llamada ciencia política lleva a un desarrollo conceptual del contrato. En cierto sentido, en esta época histórica de la humanidad se asentaron algunos principios que son los que regirían el desarrollo de la teoría general del contrato y que estos fueron aportados en gran medida por el conocimiento español.

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