Crisis del Capitalismo.

Crisis del Capitalismo

Entre 1873 y 1896, la economía sufrió los efectos de la gran depresión.

La Crisis se origino por una superproducción, que fue una base del ciclo capitalista caracterizada por una producción en masa de mercancías (mediante la utilización de maquinarias y una mejor producción) y el hecho de la dificultad en la venta de las mismas. Lo cual ocasiono el cierre de muchas empresas o fabricas, la descendencia del comercio, pocas ganancias para los capitalistas, tener que reducir gastos como ser a el personal, etc.

Los obreros sufrían de una gran explotación por parte de los capitalistas en su afán por fabricar las mercancías en gran cantidad, teniendo que cumplir jornadas extensas en las cuales les pagan un sueldo miserable por lo cual se dice que el capitalismo tenía una importante contradicción dado que establecía los medios de producción privados pero utilizaba fuerzas de trabajo colectivas.

Durante esta crisis las relaciones de competencia obligaban a los capitalistas a implementar nuevas y mejores maquinarias para tener una mejor productividad y venderla a un precio más bajo que su competencia.

Esto hizo que disminuya el “trabajo vivo” lo cual era la contratación del personal debido a que como no entraban ganancias no tenían parar pagar los sueldos, y un aumento a el “ejército industrial de reserva”, la clase social que quedaba a la espera de un trabajo. Este ejercito tenía un importante descontento debido a la desocupación por la que estaban pasando, al ser explotados y reemplazados por la nuevas maquinarias.

Fin del Capitalismo

Con el objetivo de evitar futuras superproducciones los capitalistas y los estados decidieron intervenir y regular la oferta y demanda en los mercados.

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