Crisis y noción de identidad mexicana en la novela El amante de Janis Joplin, de Élmer Mendoza.
Enviado por sara.cardonav • 3 de Abril de 2017 • Informe • 1.671 Palabras (7 Páginas) • 277 Visitas
Universidad de Antioquia
Pregrado en Letras: Filología Hispánica
Literatura Contemporánea
Profesor Gustavo Forero Quintero
Estudiante Sara Cardona Vásquez
Primer artículo científico.
Bibliografía: Élmer Mendoza. El amante de Janis Joplin. México D.F: Tusquets, 2013.
Crisis y noción de identidad mexicana en la novela El amante de Janis Joplin, de Élmer Mendoza.
El amante de Janis Joplin cuestiona la identidad mexicana desde la crisis de su organización social. El propósito del autor es cuestionar la problemática de identidad mexicana en torno a la reflexión de su historia. La represión a la que han sido sometidas las otras posturas respecto a la organización social del estado o su sistema político han trazado en México una historia cruenta y llena de injusticias. El presente artículo se vale del sistema de argumentación por causa/efecto para indagar sobre las principales problemáticas y analizar sus causas según son presentadas en la obra. Los temas desarrollados en este texto proponen a la crisis de identidad mexicana como consecuencia de un sistema fallido. En esta obra la relación causa /efecto entre crimen y sanción se rompe debido a que la justicia se impone a los narcotraficantes y guerrilleros que son los que infringen la ley con la muerte mientras que los delitos cometidos por los agentes políticos y militares como la corrupción y delitos de lesa humanidad quedan en la impunidad. La justicia mexicana jerarquizada y nada imparcial se evidencia desde la anomia total de esa sociedad como consecuencia de la ausencia de justicia legal, por ésta razón es que al inicio y hacia el final de la obra el protagonista David Valenzuela hace su propia justicia obligado por las circunstancias:
“David miró a su oponente, que antes de sacrificarlo se daba el lujo de apuntar al cielo con la pistola, para luego bajar el arma lentamente, cuando tocó una roca con la punta de los dedos y le tiró una pedrada veloz a la cabeza, Pock, como supremo mecanismo de defensa.” (14).
Es evidente que el crimen aquí cometido se justifica en la defensa propia, a partir de este momento una “parte reencarnable” va a presentarse al protagonista como su karma para recordarle todo el tiempo que ahora es un asesino y que eso no cambiará. En este punto bien podría plantearse que todos los infortunios que vive este personaje como consecuencia de varias justicias que quieren castigarlo, por una lado la legal , por otro la moral y por último la de los narcos. ha traspasado la frontera más cercana . A su vez, contribuyen con la diversidad al interior de los mismos en respuesta a los intereses, códigos, normas y rituales que se comparten dentro de la cultura dominante. También corresponde a la sumatoria de las diferentes identidades individuales que conforman un grupo social, ya que son todos elementos que permiten identificarnos, caracterizarnos y mostrar qué tenemos en común y qué nos diferencia de otros lugares o culturas. La cultura es todo aquello que nos identifica y que nos vincula con los sitios donde vivimos o hemos vivido.
En la obra, México se presenta como un país en el que el proyecto de identidad ha fracasado como consecuencia del olvido.
“El chato aconsejaba que no le hiciera caso, En el fondo no es más que un viejo reaccionario, un pequeño burgués temeroso, un tipo que no reconoce el papel histórico del proletariado emergente.” (60).
El héroe de la historia
“Tienes que ser consecuente con tu época, con tu responsabilidad histórica ; yo sé que no me agarras muy bien el rollo, primo, ni modo;no es tu culpa; quiero que sepas que el régimen por el que luchamos va a hacer posible que enfermedades como la tuya se curen, en un gobierno socialista no habrá retrasados de ninguna especie.” (61)
Este país se exhibe desde una mirada crítica en la que el estado se presenta como el mayor criminal por las injusticias, asesinatos y corrupción cometidos a causa de sus políticas represivas.
La respuesta fue seca: Lo va a atender el comandante cuando llegue, Quisiera llamara un abogado, No hay télefono, Pídale que venga, no hay recadero, ¿No tiene criterio? …¿Ésa era la impartición de justicia? Qué bueno que no iba a estudiar leyes, qué bueno que no iba a entrar a esa podredumbre. Si en unos años no se puede pasear de noche, si este país se convierte en el paraíso de la violencia, todos seremos culpables.(145).
“Usted encarguese: quieren dinero, con el gobierno todo se arregla con dinero; en lo que no quiero que me vaya a fallar es en lo de mi amigo.” (167).
“Mire, amigo: es muy difícil ganarle al gobierno, y más en estos casos, porque toda la lesgilación está en contra: no hay una ley que proteja a los sediciosos, o que se pueda interpretar para lograr el sobreseimiento de la causa, ya vé cómo están batallando para echar fuera a los presos del 68,(...) Ahí está el detalle, se está resolviendo por la vía política, no legislativa, (...) ” (168).
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