Definición E Importancia De Las Competencias Educativas

Definición e importancia de las competencias educativas y productivas

1. Demandas del sector educativo

Nos encontramos en un momento histórico que pone en entredicho al sistema educativo tal y como lo conocemos. En el mundo actual, absorbido y dominado por la globalización, por los medios de comunicación mundiales, por las grandes transnacionales, la educación ve cuestionados sus objetivos y procesos. Más aun, cuando este mismo proceso de mundialización, hasta la fecha indetenible, ha disipado las trazas de los rasgos que identifican a las comunidades como tales, y su cultura, sus tradiciones, sus expectativas, han cedido su lugar a una cultura mundial, centrada en el consumo, en las redes sociales, en el individualismo.

Ante este panorama, un replanteamiento de lo que la educación ha venido realizando a lo largo de los últimos 20 años, es necesario, sobre todo cuando se enfrenta a las demandas que realiza el sector empresarial e industrial.

La educación global demanda nuevas formas de implementación técnica; significa un rol diferente para el maestro, docente o educador, y una selección eficiente de nuevos contenidos educativos.

La información que debe ser difundida a los estudiantes, por ejemplo, no puede continuar difundiéndose a través del “docente de aula”, labor para la cual los maestros, y cualquier otro profesional, son cada día “menos competentes”.

El enfoque de “centro educativo”, donde se sostuvo siempre que era posible “encontrar” o tener acceso a todos los “recursos educativos” necesarios para la formación del alumno, es hoy obsoleto, pues los recursos educativos actuales se hallan en la vida cotidiana y distribuida por el mundo. Incluso el rol de “facilitador” o “mediador” que parece ahora rescatarse para el maestro, puede ser insuficiente o estar erróneamente formulado, cuando la “educación” escapa a las “escuelas”, cuando los niños -y los mayores también- aprenden y se forman en la vida cotidiana, en el hogar, en la calle, en la televisión, en el trabajo, en Internet.

Y los contenidos diarios de la educación formal, por ejemplo un curso de Historia que resalte las causas y evolución de la Segunda Guerra Mundial, quedan relegados en cuanto a la motivación de los estudiantes de secundaria y a su utilidad futura, frente a una emisión del noticiero o una mesa redonda de la CNN; he ahí una de las muchas formas de “escuela global” de nuestros días.

2. Vida activa del estudiante

Costa Rica, como país en vías de desarrollo, ya ha ingresado en la era de la globalización; el establecimiento de laboratorios de cómputo en las escuelas, aún en las más alejadas de las zona urbanas, permite considerar un cambio en la educación costarricense, pero es necesario capacitar a los educadores y brindarles las herramientas necesarias para lograr comprender esta nueva era cibernética.

En el pasado, los niños adquirieron su lengua, sus valores, sus costumbres, sus conocimientos y su forma de conocer situados en una cultura específica, con rasgos más o menos “sedimentados” y “estables”. Hoy, cada vez más, los niños se socializan recibiendo la influencia multicultural de este mundo globalizado en el que están inmersos a través de los medios de comunicación: TV por cable, satélite, Internet, etc. Su entorno cultural es el mundo. Cabe preguntarse: ¿Qué implicaciones tiene este hecho para la educación? ¿Se le está abriendo el paso a un ciudadano universal? ¿Cuál es la identidad de este nuevo ciudadano? ¿Es válida, de cara al futuro, nuestra preocupación de que la educación sea intercultural y contribuya a afirmar nuestros valores culturales, y desde allí dialogar y asimilar la “cultura universal”? ¿Qué rol juega la educación y los educadores en este contexto?

Otro aspecto importante es el cambio: cambio en el conocimiento científico, cambio en la tecnología, en el arte, etc. Se observa que, en la actualidad, las personas experimentan en un solo año más cambio tecnológico que el que los abuelos presenciaron en toda

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