DISTINCIÓN ENTRE COMPETENCIA EDUCATIVA Y DE VIDA LABORAL

DISTINCIONES ENTRE COMPETENCIAS EDUCATIVAS Y LAS DE VIDA LABORAL

INTRODUCCIÓN:

Desarrollar competencias para la vida implica la formación de competencias laborales, es decir, competencias asociadas a la productividad y la competitividad. La experiencia del país muestra que los jóvenes necesitan mejores herramientas conceptuales y metodológicas que les posibiliten desempeñarse con éxito en su quehacer laboral y una propuesta educativa que los prepare para enfrentar con seguridad el desafío y la responsabilidad de ser productivos para sí mismos y para quienes los rodean. Esta necesidad se acrecienta en la actualidad cuando los cambios sociales, económicos, culturales y tecnológicos plantean cada día nuevas exigencias al mundo productivo.

DESARROLLO

Al analizar mi práctica educativa durante el tiempo que estuve frente a un grupo de alumnos de niños a un grupo de alumnos adultos, en el Instituto Estatal de Educación para los Adultos (IEEA), me permitió conocer los grados de competencias que logre alcanzar con las habilidades, las aptitudes, las actitudes y destrezas que en su momento fueron utilizadas. Recuerdo que estaba a cargo de un grupo de alumnos (adultos), que iniciaban su primaria dentro de una fábrica de motores, y que algunos ya contaban con aprendizajes en lectura y escritura, por lo tanto tuve que cambiar mis esquemas de enseñanza, porque no podía aplicar la misma metodología en la enseñanza escolar, que en la formación de personas adultas, porque hay diferencias esenciales entre cómo aprende un adulto y cómo aprende un niño, Estas diferencias radican principalmente en el dominio de habilidades, estrategias de aprendizaje, la motivación, los intereses personales, su situación personal, la disponibilidad que tenga y las condiciones en que se encuentre, su nivel de autoestima. Por lo tanto considero que al conjuntar todo estos conocimientos y habilidades de manera integrada, logre ser una persona competente.

Esta experiencia me permitió cambiar ideas pero sobre todo mi función como docente donde la terminología que utilice como: clasificar, analizar, predecir, crear, deducir, elaborar, pensar, permitió al adulto ubicarse en la lógica que representó para él el estudio. Y ahí comprendí que tan importante es que conozcamos y comprendamos las situaciones en las que el adulto puede estar involucrado. En esta práctica educativa con los adultos se logro utilizar competencias para la vida y especialmente las de la convivencia y para la vida en sociedad.

La similitud de mi trabajo al quehacer docente es que un bibliotecario es capaz de diseñar y elaborar actividades dirigidas a los alumnos, principalmente enfocados a la lectura, actividades que el docente realiza también. El bibliotecario y el docente forman parte del entorno educativo de los niños, siendo necesaria su cooperación y trabajo en conjunto para mejorar la calidad educativa.

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