Ensayo Don Bosco Decada Segunda
Enviado por Xaviert • 24 de Junio de 2013 • 603 Palabras (3 Páginas) • 949 Visitas
Década segunda de la vida de Don Bosco
Juan don Bosco era un hombre luchador que nunca dejaba caer sus anhelaciones y sueños, su vida eran los jóvenes en general pero en especial los que eran explotados o extorsionados le gustaba mucho enseñarles a leer y escribir.
Don Bosco se prepara para ser Sacerdote en los novicios le interesaba mucho esa vocación de Sacerdote, en el transcurso de su preparación a don Bosco le afectan algunas muertes de sus amigos Sacerdotes pero a pesar de eso el continua con su preparación para ser Sacerdote, don Bosco ordenado Sacerdote el 5 de junio en la capilla del palacio arzobispal de Turín por el Monseñor Luis Fronsoni.
Los tres primeros años de su experiencia presbiteral en Turín (1841 – 1844) son definitivos ya que su reflexión y sus oraciones eran más fuertes y su ayuda con los jóvenes más pobres crece.
Juna Bautista Lemoyne llega a afirmar que el espíritu de don Bosco es el de San Francisco de Sales transfundido en San Vicente de Paul.
Don Bosco delinea en sus memorias algunos rasgos esenciales de Luis Guala, Felipe Colzio, Juan Borel, y sobre todo de José Cafasso (1811- 1860)
Don Bosco sigue todas sus enseñanzas de sus sabios antecesores, aunque en alguna etapa don Bosco casi se decepciona de su vocación ya que veía que otros sacerdotes, pasaban en fiestas, bebían, apostaban, etc.
Pero eso no era impedimento para Juan don Bosco ya que pedía al señor y la virgen María que le guiase en su camino y que quiere hacer la voluntad de Dios para servirle ayudando a los más necesitados.
Cuando don Bosco por fin acaba y se gradúa como sacerdote, Su madre acude y lo felicita, y le dice algunas cosas entre ellas que se juntara con personas que son devotas de la Virgen María y que si eso es lo que a él le gustaba que ella lo apoyaba en todo, que siga su camino y antes de cometer alguna falencia primero dejara el Sacerdocio, Don Bosco con lágrimas en los ojos le dice que gracias por sus palabras que siempre las llevara en su corazón hasta el final.
En las vacaciones que eran un peligro para los seminaristas que duraban cuatro meses, don Bosco se dedicaba a diferentes actividades algunas de ellas era, leer y escribir, también se entretenía en la madera, clavijas y trompos, también dedicaba su tiempo libre a dar Catecismo a los de su pueblo, que eran jóvenes entre los dieciséis y diecisiete años, también les enseñaba a leer y escribir las clases eran gratuitas, solo lo único que les pedía don Bosco era su dedicación y ganas de aprender.
Don Bosco mantiene una relación íntima con Luis Comollo quien fue su amigo de casi toda la vida de don Bosco, eran compañeros de clases y siempre se aprendía algo nuevo de él dijo don Bosco, siempre se escribían y cada vez que podía se venían a visitar.
Una vez don Bosco tuvo un
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